Una Estrategia oportuna para la DC: Respuesta a nuestro Camarada Jorge Navarrete. Gonzalo Wielandt

Nuestro Camarada Jorge Navarrete ha hecho una declaración que ha molestado a muchos de nosotros. En mi caso, no por las palabras utilizadas, sino que por lo que puede traslucir. Ahora bien, quisiera empezar mi respuesta por las conclusiones que Jorge Navarrete ha esbozado.Él concluye: “Puestas así las cosas, las razones por las cuales Walker será el próximo presidente de la DC son básicamente tres: el haber ganado la bandera de la renovación; la opción de neutralidad que adoptó Gutenberg Martínez, y porque no existió otra candidatura que mejor apelara al sentido común ciudadano (al parecer, ahora, también partidario)”.

De las tres razones que Jorge Navarrete menciona me quedo con la última. Es cierto, la candidatura de Ignacio Walker se conecta con un sentido común demócrata cristiano en el sentido de su reposicionamiento en el centro del sistema de partidos con el objeto de recuperar electorado del pluralismo centrista que votaba, alguna vez votó o votaría por la democracia cristiana.

Por otra parte, la renovación yace en todos lados, por lo tanto, no es un elemento exclusivo de Walker. Sí, lo que puede constatarse como relevante es la imagen de marca de Ignacio Walker, lo que en comunicación política actualmente es fundamental y sobretodo en una sociedad chilena condicionada mediáticamente y que impone una lógica irracional en un caso o emocional en el otro sobre las decisiones de las personas.

Por último, la razón de la neutralidad de Gutenberg Martínez que emite Jorge Navarrete devela un desconocimiento de la realidad partidaria y un desconocimiento de la realidad sociopolítica del partido y del país.

Gutenberg Martínez no tiene ningún poder electoral para revertir un sentimiento partidario de reposicionamiento en el centro político y de recuperación de identidad partidaria. No hay plataforma institucional, político-electoral y clientelar para controlar una elección por parte de él. Ninguna. En consecuencia, nuestro camarada Jorge Navarrete, a mi entender, no expone o no entiende las verdaderas razones de un eventual triunfo de Walker.

Siguiendo en el tema de las razones, la necesidad de reposicionamiento en el centro de sistema de partidos tiene que ver con la necesidad histórica de una estrategia adecuada e inteligente frente a un gobierno y a un sector político que ha logrado penetrar de sobremanera el espacio del centro debido, por una parte, a desperfilamientos propios que han terminado en desencanto y bronca y, por otra parte, a audacias de ellos.

La siguiente afirmación de Jorge Navarrete: “A Mariano Fernández, por su parte, no le quedó más alternativa que sumar a lo que quedaba disponible -lo que botó la ola, dicen sus adversarios- para conformar una candidatura que no termina por convencer”, devela nuevamente un desconocimiento de la realidad partidaria. La lista de Mariano Fernández, gran camarada del mundo de avanzada del partido, refleja en estricto rigor un conjunto de errores políticos. Los que se resumen en ver la solución del partido, en una solución de modus operandi reaccionario. Típico de los partidos en su etapa de ocaso conservador. Es decir, incapacidad para generar una tesis política inteligente y audaz de la que emane una estrategia certera como hubiera sido asumir la tesis de un partido de centro de vanguardia socialcomunitaria. Los operadores y formadores de esa lista prefirieron excluir para construir y con ello restringirse a una lógica exclusivamente de componenda.

En el caso de la lista de Ignacio de Walker, ésta demuestra una debilidad que al  mismo tiempo es una fortaleza. La lista de Ignacio Walker es una lista de amigos, pero esa característica refleja una cohesión y coherencia interna para dar consistencia a una conducción partidaria, lo que ya está orientado por la tesis tantas veces enunciada por Ignacio Walker.

En consecuencia, la estrategia de votar por Walker es la estrategia política de reconquistar espacios perdidos en el sistema de partidos que impliquen recuperar votación y refortalecer el poder político del partido en Chile. Si bien, puede ser vista como una lista conservadora y liberal, la estrategia soporta esa crítica por cuanto el bien común y la sobrevivencia del partido están primero, lo que no ignora los sanos sentimientos e ideales de nuestros leales con la lista de Mariano Fernández.