domingo, abril 12, 2009

Diego Calderon y Pepin Reyes siguen intercambiando opinion sobre LGE.

Estimado

Aquí jamás se ha hablado, al menos por mi parte, de tener la verdad absoluta ni menos de pretender imponer mis posiciones, para ello está el debate y las instancias pertinentes a las que asistimos con decenas de líderes secundarios en su momento para luego ser ignorados.
Responde mis argumentos pero con interpretaciones distintas y obviando argumentos que a mi juicio son importantísimos:
1- No le doy la razón, no es la ideologización la que provocó el Golpe, fue la polarización… la discusión que precedió al Golpe fue muy poco ideológica, la verdad es que giró en torno a métodos, ritmo y tiempo de los procesos.
2- Habla que en sus tiempos también había colegios públicos y privados, es cierto, pero es incomparable. La cobertura era mínima, la calidad y prestigio de la profesión docente muy superior y los establecimientos privados eran en su mayoría sin fines de lucro, administrados por Congregaciones religiosas cuyo único interés era educar y promover una concepción de la sociedad, lo que hacía que incluso promovieran la inclusión de sectores vulnerables a sus establecimientos, al contrario de lo que ocurre hoy en día. Y sabe que es lo más diferente, que en aquella época si bien existían diferencias en la calidad, no existían diferencias de clases porque tanto los liceos públicos como los privados tenían una mayor homogeneidad.3- La “baja calidad de los profesores” es indiscutiblemente relativo, y no dice relación con ellos como persona sino con situaciones estructurales como la capacitación, las excesivas horas de trabajo, los bajos sueldos, la pésima formación que otorgan la mayoría de las universidades y como consecuencia de todo lo anterior, el mal sistema de ingreso y de selección. Toda ésta propaganda en contra de los profesores solo contribuye a disminuir el prestigio de la carrera y en consecuencia disminuir aún más el interés en estudiarla.
4- Con respecto a esos Colegios milagro de los que habla, que son claramente excepciones, lo más probable es que me nombre ciertos colegios que son administrados precisamente por Congregaciones religiosas, como el caso del liceo Nocedal de propiedad del Opus Dei. No son con fines de lucro, sino con fines ideológicos, lo cuál es positivo.
5- No puedo saber como sería la educación hoy en día si no hubiesen existido los establecimientos de financiamiento compartido (únicos en el mundo), sin embargo, podemos especular debido a que su crecimiento se debe entre otras cosas a un amarre de la Dictadura a la educación pública con la municipalización lo que no solo amplio la cobertura sino que ahora también gana día a día matrículas a los liceos municipales que compiten (¡mercado en la educación¡) en evidente desigualdad.
6- No responde con ningún argumento a la crítica que realice a la importancia de la pedagogía en la formación de los niños y jóvenes, simplemente se refirió directamente e indirectamente a la educación por profesionales como el ingreso de personas con conocimiento, con vocación y con aires de renovación. En la anterior respuesta desarrolle argumentos más desarrollados que esos.
7- Primero dice que el gran cambio debe ser en el aula y después dice que la LGE es el gran cambio en los últimos 36 años. Simplemente no lo entiendo.

Por último, insisto, no pretendo imponer ideas ni un “absolutismo” de ellas como usted insinúa, simplemente quiero insistir en que la LGE entorpece el esfuerzo de muchos por avanzar en una educación de verdadera calidad y una profesión docente digna, como es en un país que suelo ocupar como referente: Finlandia. No lo digo solo yo, sino también grandes expertos en educación como García Huidobro y Jorge Manzi, e incluso en el tema de los profesores Mario Waissbluth de educación 2020 vinculado con grupos liberales.

Diego Calderón
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