miércoles, abril 25, 2007

Definiciones en la elección francesa

La primera vuelta de las elecciones presidenciales en Francia ha permitido delinear una importante recomposición del mapa político, que tendrá su definición en la contienda entre el conservador Nicolas Sarkozy y la socialista Ségolène Royal el próximo domingo 6 de mayo.La alta participación electoral, superior al 84%, revierte la tendencia de los últimos años, de más alto abstencionismo y desinterés, en consonancia con una crisis de representación que repercutió en los partidos tradicionales. Este notable aumento de votantes es una respuesta a la mayor oferta política, con cuatro candidatos que presentaron algunos rasgos más nítidamente diferenciados.La aparición en escena de una mujer que realizó su campaña como candidata socialista por fuera de la estructura partidaria, concitó mayores adhesiones en sectores que aspiran a una renovación acorde con las actuales demandas y movimientos sociales. Del mismo modo, el perfil del ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, que propone cambios desde el conservadorismo, logró atraer a otros sectores que expresan sus temores y disconformidades sobre la marcha de la economía, las tensiones sociales, las políticas sobre inmigración y seguridad.Otra importante novedad aportó el tercer candidato, Fran»cois Bayrou, con una propuesta centrista moderada que lo coloca como referente decisivo para la definición en la segunda vuelta. Finalmente, el relegamiento a un cuarto puesto del viejo líder ultraderechista Jean Marie Le Pen revela un afortunado retroceso de una derecha que promueve el enfrentamiento social, la xenofobia y el nacionalismo antieuropeo.Las elecciones presidenciales que se están desarrollando en Francia permiten delinear los contornos de una recomposición del sistema político francés que deberá dar respuesta a nuevas demandas y expectativas de cambio.