"Cuidando a Adolfo" por Senén Conejeros, director de la Escuela de Periodismo, U. de la República

Así como para muchos que son DC, incluidos los que lo son “de nacimiento” o con la “fe del carbonero”, es impensable su partido con un Zaldivar Senador fuera de él, para cualquier observador de la política, Adolfo tiene mucho que perder. Sin embargo, mucho más que perder tiene la Democracia Cristiana y la Concertación.El capítulo actual del desencuentro entre adolfistas y gutistas puede tener una componenda momentánea, incluso presionada desde La Moneda, pero es sólo una parte de un conflicto mayor respecto del cual bien puede hacerse un pequeño ejercicio de política ficción.Adolfo fuera del partido y candidato a Presidente sólo y por “la libre”. Sumaría, más o menos, los votos que le ha faltado a la Concertación para ganar en primera vuelta y los mismos que requiere para ganar en segunda. En el peor de los casos, el Senador queda en inmejorable posición de negociar y, de Senador por Coyhaique, podría pasar a Ministro de todos los chilenos.¿Y que tal un escenario de Adolfo como candidato de la “derecha democrática”, más una tajadita de los otros partidos, incluidos un par que oficialmente hoy están y no están en la Concertación, más otros “movimientos” antiguos y recientes?. Sería algo así como todos contra la Concertación y no para negar lo que ha hecho la coalición sino “para rectificar” lo que está haciendo mal. Y no crea que en política no se dan cosas increíbles. Esto no sería tan descabellado, por cuanto así como van las cosas, la pelea el 2009 será por llegar segundo y no por ganar. Si no se produce un fenómeno Lagos o algo por el estilo, el próximo Presidente bien podría ser el que llegue segundo.Los grandes riesgos del senador Zaldívar, don Adolfo, es que fuera de la DC no serán muchos sus camaradas que estén en condiciones de seguirle si se queda donde está, sólo como un Senador que tendrá un duro camino para su reelección. Si llega hasta el final en su disputa partidaria su mejor salida es un lanzamiento a una aventura más grande, para lo cual ya debiera estar “bombeándole agua independiente y de derecha democrática a la piscina presidencial”.Finalmente, aun cuando todo lo anterior fuera sólo política-ficción, lo concreto es que Zaldivar fuera del Gobierno se transformaría, en los siguientes dos años, en “el voto” decisivo en el Senado.No estoy para nada de acuerdo con el Senador Pizarro que dijo que “sin Adolfo Zaldivar no creo que la Concertación pierda mucho…”. A lo menos, su coalición pierde un voto en el Senado, lugar en donde el gobierno necesita de cada sufragio, habida cuenta que el negocio con el senador Bianchi es de difícil repetición.El PDC perdería, también, porque se iría un sector mediano, minoritario o ínfimo. Como están las cosas al interior de un partido donde quien custodia la disciplina es un ex Ministro del Interior, que le torció la nariz a la ley usando del poder para votar con su carnet de identidad y después amenazó a los periodistas; cualquier éxodo, aún el más ínfimo, termina en daños cuyas proporciones no se pueden hoy aventurar. ¿Se imaginan los dirigentes de ese partido una negociación de presidenciales y de cupos parlamentarios, con una DC que baja un 4 o un 5 por ciento de su votación municipal?Una buena receta quizás sería que en la DC se preocuparan más de la municipal del año que viene que de la presidencial de 3 años más.Cambio 21.