domingo, septiembre 12, 2010

Rapa Nui: El otro conflicto ancestral latente

El conflicto Rapa Nui por la restitución de tierras ancestrales crece y complica al Gobierno. La historia empieza en 1888 con el pacto Rapa Nui - Estado chileno. En él, los clanes familiares aceptaron entregar temporalmente, terrenos suyos, para la Comisaría y otros servicios del Estado. El tiempo distorsionó el pacto y ahora, inversionistas privados son dueños del lujoso hotel de seis estrellas Hanga Roa instalado en uno de esos terrenos, la familia Hito dueña ancestral del terreno, se tomó el hotel. En total, son más de 30 los terrenos tomados, reclamados por los isleños y, que el Estado chileno, de forma inconsulta, inscribió como fiscales en 1933.


 El conflicto forma parte de esas promesas que todos Gobiernos han incumplido al pueblo Rapa Nui, el que se queja de indiferencia y aislamiento.
 Fue el año 1888 cuando los Rapa Nui acordaron ceder soberanía a Chile. En dicha ceremonia, en presencia de los nativos su rey Atamu Tekena tomó un trozo de pasto con tierra, le sacó el pasto y se lo entregó a los representantes chilenos y él se quedó con la tierra.

Para los isleños y antropólogos, con ese gesto se selló el acuerdo que el Estado chileno sería soberano en Isla de Pascua y, que los isleños se reservaban el derecho sobre sus tierras. Eso mismo, quedó plasmado en el documento que avaló el pacto, donde no se hace alusión a la propiedad de la tierra y, en su versión en lengua rapanui, se usa el concepto de “mau te hoa kona” para referirse a Chile, es decir, “amigo del lugar”.

A 122 años de aquel tratado, desde principio de agosto, los pascuenses exigen la devolución de sus tierras mediante tomas pacíficas. El presidente del Parlamento Rapa Nui, Leviante Araki, amenazó con desvincularse de Chile y anexarse a la Polinesia sino se escuchan las demandas de su pueblo, dijo que la única salida es  revocar la inscripción de las tierras  ocupadas. “Los Rapa Nui son los dueños de la tierra, son los originales dueños de las tierras que han sido ocupadas por el Estado de Chile hace más de cincuenta años. El Gobierno tiene que sacar la inscripción de 1933, así volvemos a aceptar a Chile, si no se va de aquí, no lo aceptamos más, nos vamos a Oceanía”, aseguró.

Tampoco ayudó la renuncia del gobernador, Pedro Edmunds Paoa, el representante del Consejo Urbano de Rapa Nui, Lenki Atán, dijo: “Con el gobernador Petero Edmunds Paoa o sin él, la gente va a seguir en la toma, va a seguir en sus reivindicaciones”.

A fines de agosto los pascuenses -representados por  Alfonso Rapu vocero de los clanes en conflicto con el Estado y primer alcalde electo en la Isla en 1966- entregaron una carta para el presidente Piñera, reiterando la restitución de los terrenos ancestrales, en la gobernación de Isla de Pascua.
Lenki Atián aseguró que rechazaron la exigencia del gobierno de deponer las ocupaciones para dialogar “No lo van a hacer así, van a ir a conversar y cuando salga humo blanco en Santiago van a desocupar”, y recalcó que todo se había  desarrollado en forma pacífica, hasta que, desde el continente se enviaron Fuerzas Especiales de Carabineros, las que ayer a las seis de la mañana los desalojaron, resultando detenidos ancianos, niños y guaguas. Pero ayer en la tarde los isleños armados con palos y piedras retomaron el hotel Hanga Roa.  Marisol Hito, aseguró que el hecho es“un rotundo fracaso en nuestro ánimo de dialogar con el Presidente de la República”.

Este extenso conflicto podría haberse atenuado dictando la LOC que está en el Congreso desde el2007, cuando se aprobó la reforma que califica a la isla como “territorio especial”, y crea laProvincia de Isla de Pascua, propiciando un gobierno y administración regidos por un estatuto especial, según los intereses del pueblo Rapa Nui, que ahora es regida por el gobierno regional deValparaíso.
 Para Patricia Vargas, investigadora del Centro de Estudios de Isla Pascua y coautora del libro“100 años en Rapa Nui”, el aspecto normativo del conflicto “Tiene que ver con esta condición de aislamiento, con las precariedades que tiene este territorio u otro. Reconocer que Chile no es diverso solamente culturalmente, sino en los desafíos que significa habitar el territorio”

Los rapanui tras años de promesas ya no confían. Leviante Araki es enfático: el estatuto es uno  más de los incumplimientos del Estado chileno. “El estatuto para nosotros es una mentira, lleva años tramitándose. Ya estamos cansados. El pueblo Rapa Nui ha sido respetuoso, paciente y tolerante, hoy el vaso está lleno, ya se rebalsó”, dijo.
Hay que seguir este conflicto, es más profundo y complejo que lo que suponen las autoridades.