martes, noviembre 03, 2009

Marco y la DC . Jorge Andrés Cash. Presidente Metropolitano-JDC

Señora Directora:

Una mirada desapasionada obliga a ponderar la candidatura de Enríquez- Ominami como una opción legítima y competitiva, no obstante letal para la Democracia Cristiana.

La legitimidad de su opción no arranca de haber satisfecho las exigencias legales para competir ante la ciudadanía, sino, más bien, de haber sido privado por la dirigencia PS del derecho a concursar en las primarias oficialistas. A su vez, la competitividad de su candidatura no se explica necesariamente por los porcentajes que le asignan algunas encuestas. Dichos números pueden responder más a factores negativos, como las falencias que aún presenta nuestro actual sistema político, que a un liderazgo genuino.

Por último, resulta evidente inferir de su comportamiento, tanto en la ambigüedad de sus planteamientos políticos como en la ausencia de una carta de navegación programática seria, que sus intenciones van mucho más allá que derrotar a Frei en primera vuelta: también se extienden a que Frei sea derrotado en segunda vuelta por Sebastián Piñera.

Este último es el único escenario que le permitiría liderar sin presiones un nuevo referente político y —bajo la excusa del recambio generacional— aglutinar a quienes no coinciden en más que la fecha del carnet y en conceptos tan vacíos como el famoso “progresismo”, para cumplir el viejo anhelo de Carlos Ominami y otros de dejar proscrita a la DC del escenario político.

Por eso no me parece sensato ni digno recurrir a Enríquez ni establecer ninguna clase de puente con su opción, ya que, incluso en el escenario de la negociación formal con Frei en segunda vuelta, el futuro gobierno se vería sometido a un permanente chantaje.

Jorge Andrés Cash

Presidente Metropolitano-JDC
Carta a la Segunda.

[+/-] Seguir Leyendo...