Amigos, lamentablemente ocurriò lo que debià pasar, se cometiò la injusticia.E.Reyes.

Concurrieron a ello, además de los parlamentarios "a favor", una serie de circunstancias, ya descritas en un análisis anterior.
Ahora, nos queda la realidad. Se acabaron los cálculos y las esperanzas. Cómo decían los viejos de antes "...los hechos, los porfiados hechos", esos que hacen la diferencia entre el ciego de verdad y el que no quiere ver.
Se pensó que el justo juicio de algunos opositores, que no habiendo ganado jamás una elección (alianza) o habiendo sido siempre una minoría despreciada en sus partidos (los "independientes") iban a dejar pasar la oportunidad de hacer claudicar al gobierno de Bachelet. ¡Qué error de visión¡, ahora hemos sido invitados a vivir la dura realidad, la teoría del desalojo está comenzando a ser probada por sus propiciadores.
Pero, ya lo dicen los ingleses "A muerto el rey, viva el rey". Yasna ya es historia, su fantasma seguirá paseándose por los pasillos del Congreso Nacional por un par de meses, hasta ir desdibujándose con el paso del tiempo. Pero como en política "se han visto muertos cargando adobe", en el futuro (no muy próximo) nuevamente podremos ver a mi camarada Provoste luchando contra molinos de viento, lanza en ristre, para sacudirse el polvo de la derrota de este momento.
Sin embargo, esta ejecución pública, trajo dos muertos por el precio de uno. ¿Quién tirará la toalla al ring, para salvar a Lavín, antes de que caiga en la lona?. Pienso que nadie lo hará. Hay que recordar sus palabras "...si yo fuera diputado, votaría en contra de esta acusación..." En la borrachera del éxito, o la derrota (como quiera verse), otro fantasma ha empezado a pasearse por los salones de la política, sin que por ahora, alguien lo vea. Es difícil encontrar la fórmula para que la presidenta aproveche a Lavín en este momento; y qué decir de la derecha, Lavín ha pasado a ser (al menos por un tiempo) un leproso para sus antiguos fieles y leales camaradas. Es necesario recordar que él es quién más votos ha sacado para la derecha en casi toda su historia.
La votación de hoy es una gran lección para todos. Nadie puede sacar cuentas alegres. En mi opinión, lo de hoy puede ser leído también como una derrota para la derecha. El problema es que había que salir jugando hacia adelante, como el gran "Don Elías" y la derecha lo hizo, pero es claro que no lo harán nuevamente, pues los costos serán muy altos, saben que dieron un "golpe blanco" a la institucionalidad política de Chile.
La Concertación, más allá de notificarse y "poner las barbas en remojo", debe empezar a jugar (play the game) con las reglas del juego impuestas hoy por la derecha. El mundo político chileno ya no será el mismo a partir de hoy. Es necesario que la Concertación suba la apuesta y arremeta con los proyectos de ley sobre cambio institucional. Ha llegado la hora de pedir la inscripción automática en los registros electorales, el fin al binominalismo y todas aquellas normas que pueden introducir una basa en la relación entre la derecha y los "independientes".
La realidad se ha impuesto, bienvenida realidad
Un abrazo,
Eduardo Reyes Saldías