Carta Abierta a la Militancia de Ñuñoa

Hemos visto con dolor, los hechos ocurridos en nuestro partido, yo no entré al partido a buscar culpables, yo entré al partido por los ideales permanentes del Cristianismo plasmado en el Humanismo Cristiano del siglo XX. Hoy día el partido está sumido en una guerra sin cuartel, no se ve conducción, solo animadversión, yo creo que ha llegado el momento de la pacificación de los espíritus, ha llegado el momento del reencuentro, ha llegado el momento de tender puentes, pensemos que los ideales que nos vinculan son mucho, muchísimos mas fuertes que ambiciones personales desmedidas, son mucho, muchísimos mas fuertes que un simple timbre o una campana, creo que ha llegado el momento de dejar atrás el odio, creo que ha llegado el momento de dejar atrás la venganza, ha llegado el momento de la reconciliación, gracias a Dios hoy por hoy, hay una salida, espero la generosidad de todos los Camaradas para dejar atrás odios y rencores y fundamentalmente ambiciones y dar paso a la unidad. Es por eso que leamos con atención las palabras del ex Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
"Cuenten conmigo, no para exacerbar los ánimos, sino para pacificar los espíritus. Que cuenten conmigo, no para polarizar más, sino para dialogar; no para la guerrilla fraccional, sino para una acción colectiva verdadera y honesta. Y que cuenten siempre conmigo para construir un partido amplio y generoso y no subordinado al obsesivo interés por el poder"
Fraternalmente.
Cristian Cancino Muñoz