martes, diciembre 04, 2007

OTRO SÍNTOMA DE LA DECADENCIA… J.R.Veliz

Al parecer, el mal típico del mundo moderno se encuentra en la falta de moral. La humanidad de hoy corre el peligro de ser destruida desde dentro, desde su propia decadencia moral. En un tiempo nos molesto el desalojo propuesto por la derecha fascista, están tan preocupados ellos, de los demás que no ven su mal interno, no obstante no me importan sus dolencias, me preocupa mucho la que sufre nuestro partido, que nos viene afectando tanto, y de tanto tiempo, a la enfermedad que me refiero es la del arrojo:
(Consumismun)
Si no me gusta algo lo arrojo…
Si no me cae bien algo lo arrojo…
Si los Diputados no lo aprueban lo arrojo…
Si los Senadores no lo aprueban, lo arrojo…
Si no se encasilla, se arroja…
Si la presidenta del partido no aprueba, lo arrojo…
Y arrojo, mas arrojo, y mas y mas arrojo…
Este en particular es un mal que nos pone en disputa, nos quiebra entre si, nos separa, que triste que hoy en víspera de navidad, dos seres tan importantes en nuestro partido, estén tan distantes, después de se ser ambos protagonista de la historia, que triste es también que se les tilde de derechistas a uno por no pensar igual, porque no se le dijo comunista, o cabeza de piedra, o socialista, no entiendo porque derechista, es moda. O será porque ya, se expulso de nuestro partido a la Izquierda Cristiana, y al Mapu o tantos otros por pensar diferente.
No es menos cierto, también que hoy aparezca en la encuesta de opinión, un héroe deportivo como Fernando González, mas creíble, como esperanza o futuro el hijo de Zamorano, con un puntaje atractivo para cualquier político, en ejercicio. Que ironía no les parece?
Esta enfermedad interna nos tiene al borde del fracaso, o portas del colapso de la decadencia total. No debemos mirar o culpar a otros de nuestros fracasos. Este peligro no es más que el derrumbe de las fuerzas morales. No sigamos como los necios que proclaman desalojo, miremos hacia dentro y demos todo nuestro esfuerzo por el renacer, los males externos se irán, si ponemos el remedio; la verdadera practica de la fraternidad, solo así volverá nuestra gran fortaleza, es hora de actuar como cristianos.
Que hacemos para lograr la cura?, buena pregunta, a estas alturas es otra década para resultados, si continuamos en lo mismo nuestro signo seguirá siendo el plástico, donde lo que no sirve se arroja. Nuestro actuar debe ser con ejemplo de moral, debemos cambiar nuestras actitudes, el actuar humano, de la democracia que hacen algunos o del empleo de la libertad, debe ser libre y responsable, y debe seguir siendo así, pero por sobre todo debe ser sensato. Amparar los malos actos, por no deteriorar una imagen, es falsedad absoluta, por el contrario se deteriora mas aun la imagen de los actuales políticos, por lo que se hace imprescindible la transformación a los políticos tradicionales, con el fin; de diferenciarlos de aquellos que cultivan sus valores de vida que son: la verdad, la justicia, la libertad, la paz, la armonía y la vida.
Quizás alguno me responderá mi mensaje, y me dirá no entiendo a que te refieres, para darte mi opinión, y es posible que me diga no la enfermedad es otra, por que son otros los síntomas, quizás sea así… quizás otra sea la denominación, el problema es que no hay peor ciego del que no quiere ver. El asunto es que cualquier sea el nombre o denominación, la enfermedad es sanable, es solo voluntad, y ruego a Dios en mi oración, que no se pase a cáncer.