Otro muro de la vergüenza...M.Verdugo.

Durante años y años la mayoría de los chilenos, de los europeos, de los norteamericanos, de los sudamericanos calificaban el Muro de Berlín como el “muro de la vergüenza”. Tras su caída, junto con la de los socialismos reales, hubo quienes incluso hablaron del “fin de la historia”. Se había, a su juicio, impuesto sin vuelta un modelo de “libertad política y económica”. Nada más alejado de la realidad. Lo que en realidad se impuso fue un sistema económico liberal a ultranza, globalizado, que no sólo vino a asentar modelos de injusticia, sino que agrede cada día a la naturaleza poniendo en peligro nuestra propia existencia. El calentamiento global no es un chiste. Por eso, pastelero a tus pasteles.
Pero, bueno, queremos hablar de muros. The wall. Tras la caída del muro de Berlín los autodenominados “demócratas” no tuvieron empacho en hacer lo mismo que antes habían condenado: levantar muros.
Levantó un muro Estados Unidos para impedir el ingreso de mexicanos; levantaron un muro los israelitas para separarlos de los palestinos y, en nuestro Chile, ¡también levantamos muros!
Lo hizo la alcaldesa de Lo Barnechea levantando un muro para dar tranquilidad a sus habitantes ABC1, separándolos de los pobladores del cerro 18. Lo acaba de hacer la autoridad central al permitir levantar un muro a centímetros de las casas de los habitantes de la calle Serena, en la zona sur poniente de la RM, como parte de los trabajos de construcción de una autopista.
¿Qué vemos en esta acción? Simple. La misma actitud tecnócrata, sin respeto hacia la gente, que se tuvo para diseñar y poner en marcha el Transantiago. ¿Qué pasa? ¿Este es el gobierno de alguna gente, de algunos más iguales que otros o de todos los chilenos?
Myriam Verdugo
Consejera PDC