"Ha habido liviandad en tema de La Haya". Mariano Fernandez. El Mercurio Valparaiso

Candidato a presidir la DC aclara que son "un partido de oposición en Concertación", descartando de paso que la división del conglomerado provenga de su colectividad.

Transversalidad, espíritu concertacionista y "jornada completa", para abocarse a construir partido, forman parte de la oferta del ex canciller, Mariano Fernández, quien busca la presidencia del PDC con una candidatura que, aclara, seguirá hasta el final. ¿Su apuesta? Trabajar por un partido pluriclasista, con énfasis en los pobres y en la clase media.

 "Tenemos una fortaleza: en la última elección, si bien no tuvimos un resultado en votos significativo, hubo una buena elección de parlamentarios: 19 diputados, y tenemos la bancada más importante del Senado. De modo que equipo para ser oposición tenemos", subraya.

-¿Ése debe ser el rol de la DC en este nuevo escenario?

"Hay que fortalecer la unidad interna y ser muy unidos con la Concertación. Somos un partido de oposición en Concertación. Con ella tenemos que resolver qué otras cosas hacemos. Pero no corresponde adelantar juicios de lo que hay que hacer. Hay un ciclo que terminó. Por muchas razones; por agotamiento, por errores, pero donde aún tenemos un entorno de partidos amigos. Y juntos debemos fijar la estratega con que enfrentaremos los próximos años".

-¿A qué atribuye la derrota?

"Prefiero no dejarle a un cientista político de EE.UU. que en seis meses más venga a explicarnos lo que ocurrió para que todos queden conformes. Yo pienso que se terminó un ciclo. Somos la coalición política de más larga duración que ha habido en la democracia occidental desde que existe la democracia. En ninguna parte una coalición de cuatro partidos ha durado lo que duró la Concertación. Lo máximo han sido 12 ó 13 años. Y los ciclos se generan cuando hay energía, creatividad, integración, ideas, y hay que ir corrigiendo el ciclo. ¡Y lo corregimos varias veces! Pero se agotó la energía, la creatividad...Una parte se fue con candidatos laterales. Lo que hay que hacer es asumir los errores cometidos; hacer un seminario en serio para discutir los por qué".

-No cree que ha demorado mucho el análisis de los por qué...

"No. Estas cosas hay que hacerlas con tranquilidad. Básicamente hay que generar energía nueva, para un nuevo ciclo. Pero ciertamente hay que hacerlo, porque de lo contrario, uno empieza a hacer catarsis permanente cada vez que se junta".

-A propósito de la catarsis. ¿Qué le parece el impasse entre Vidal y Velasco?.

"Sobre esta materia una breve frase: a mi los generales me gustan antes de la batalla".

-No cree entonces que la culpa de la derrota sea de Expansiva y la falta de proyectos sociales...

"No le hecho la culpa a nadie porque cuando uno está en el Gobierno hay que ponerse los pantalones y defender las cosas a fondo. Y lo que no se hizo, no se hizo. Asumámoslo como un error colectivo. Hay que empezar un nuevo ciclo. De lo que estoy convencido es que desde la DC no debe venir la división de la Concertación. Si hay otros que después la quieren dividir, será cosa de ellos".

-La duda es si tiene viabilidad.

"Bastante. Pero tenemos que ver cómo seguimos adelante. Vamos a tener el desafío de las elecciones municipales. El primer año de gestión es hacer partido y el segundo, buscar alternativas para el gobierno local, que es muy importante porque el proceso de transformación de los gobiernos locales tiene que agudizarse".

-Entonces ¿la elección municipal será una suerte de prueba de fuego para la nueva Concertación?

"Será una gran oportunidad para presentar ideas renovadas y mostrar una visión de país actualizada".

-La Junta Nacional estuvo marcada por la apertura de la coalición.

"Eso es lo políticamente correcto. Nunca me opondría a que conversemos con todo el mundo, pero no nos precipitemos".

-Pero hubo planteamientos que rechazaban esa opción.

"Bueno, algunos han corregido su visión después de la Junta Nacional, ya que la mayoría del partido tiene una posición bastante categórica que ha coincidido con lo que pensamos nosotros".

-Como ex canciller ¿qué le parece la forma en que el gobierno ha abordado la relación con Perú?

"Nosotros queríamos tener la mejor relación con Perú. Esta idea ha sido parcialmente puesta en cuestión por Lima con la pretensión de que la frontera marítima con Chile no está fijada. Y cuando uno está denunciado en el tribunal, no puede desarrollar creatividad diciendo que le da lo mismo lo que pase en el tribunal. Por eso sostuvimos que negocios, inversiones, comercio, adelante. Otras iniciativas de creatividad, como el tratado de integración que se desarrolló con Argentina, en este momento no me parecen convenientes. Y como no me lo parecieron, no las practicamos. Y creo que el Gobierno, en esta parte, no está evaluando adecuadamente las consecuencias de entrar en una especie de fase en que lo de La Haya queda a un lado, sin importancia, porque somos buenos amigos".

-Y agrega:

"Cuando me tienen frente a un tribunal es un tema complicado, porque también está involucrada la dignidad del país. Porque nadie acepta que lo lleven a un tribunal si no es responsable de algo; menos a un país. Y ahí creo que hay una liviandad del país que yo no comparto y que puede tener sus efectos".

-¿En qué sentido?

"Y es que el Perú está alegando en La Haya el argumento de la equidad, impulsando la bisectriz y no el paralelo y el paralelo es la frontera marítima en todos los países de América del Sur occidental. Es un sistema. El intento peruano es cambiar el sistema. Y el sistema de la equidad Perú lo quiere presentar con el argumento de que las relaciones entre Chile y Perú están muy bien. Y como estamos muy amigos no importa darle un poco a cada uno y todos contentos. Y cuando los jueces, que son seres humanos, ven que no hay problemas, pueden inclinarse a temas de equidad. Ahora, yo creo que vamos a ganar y bien, pero no me parece adecuado decir 'esto (La Haya) está encapsulado y que aquí no pasa nada'. Cuando nosotros gobernábamos los jueces tenían claro que no nos era indiferente el tema porque estamos afectados en la dignidad y en la credibilidad de los tratados que hemos firmado. Y los tratados se firman para cumplirlos".