MI HOMENAJE A MANUEL BUSTOS HUERTA, UN HOMBRE DE ALMA DE CRISTALES. Luis Fuentalba Reyes

Manuel Bustos Huerta
Nació el 2 de diciembre de 1943, en San Enrique, pueblito cercano a Santo Domingo.
Fue hijo de Juan Pontigo y de una campesina que trabajaba en el fundo San Enrique. A las pocas horas de nacido fue entregado en adopción a un modesto matrimonio de campesinos: don Armando Bustos y la señora Florencia Huerta.
Manuel cursó hasta sexto año de preparatoria en la escuela del fundo donde trabajaban sus padres. A los 13 años de edad dejó los estudios para dedicarse a las labores agrícolas y así poder ayudar a su familia.A los 18 años fue llamado al servicio militar, deber que cumplió en el Regimiento de Ingenieros de Tejas Verdes. Estando en plenas funciones militares, continuó con sus estudios, cursando exitosamente hasta el segundo año de humanidades.
El año 1963, después de haber cumplido su deber militar, Manuel Bustos se radicó en Santiago. Entró a trabajar como mozo en un restaurante. Luego trabajó como obrero en la Empresa Textil Andina, Posteriormente entró a trabajar a la industria textil Sumar.
En Sumar Manuel inicia su vida sindical asumiendo en poco tiempo el cargo de delegado sindical, mostrando su capacidad de conducción y liderazgo. En ese mismo periodo efectuó estudios de mecánica en Inacap, y de formación sindical en la Vicaría de la Pastoral Obrera.
En la textil Sumar, Manuel Bustos comenzó como aprendiz de maquinista, después pasó a ser mecánico de mantenimiento, trabajando por más de 30 años en esa empresa.
Luego de dos años de trabajo, en 1969 Manuel fue elegido presidente del sindicato de trabajadores, cargo que ejerció hasta 1986, ocupando además responsabilidades de dirección en la Confederación Nacional Textil, CONTEVECH.
Al momento del golpe de estado de 1973, Bustos era dirigente de la Federación Textil y de la Central Unica de Trabajadores (CUT). En su calidad de dirigente, fue hecho prisionero el día 12 de septiembre junto a cientos de sindicalistas, es llevado detenido primero al Estadio Chile y luego al Estadio Nacional.
Manuel fue un opositor al régimen militar y un luchador incansable por la vuelta a la democracia.
En 1976, Bustos fue uno de los fundadores del denominado grupo de los 10.
Ese mismo año, profundamente convencido de que “Solo la unidad y solamente la unidad, hace invencible a los trabajadores”, inicia un trabajo perseverante y consecuente. Con ello busca de reorganizar al movimiento sindical chileno que estaba siendo fuertemente reprimido por la dictadura, hasta conformar la histórica organización de los trabajadores chilenos en tiempos de dictadura; la Coordinadora Nacional Sindical (CNS) que fue en esos difíciles momentos continuadora de la CUT ; integrada por los dirigentes sindicales mas comprometidos de la clase trabajadora donde estaban representadas las confederaciones, federaciones, asociaciones y sindicatos bases a lo largo del país, todas las corrientes sindicales y políticas del sindicalismo, todas las corrientes opositoras al régimen militar sin ningún tipo de exclusión.
Manuel combatió el paralelismo y el sindicalismo que impulsaba en ese entonces la exclusión y las centrales ideológicas.
La Coordinadora Nacional Sindical con estos principios y postulados, jugó un papel importantísimo en este periodo, organizando a miles de trabajadores a lo largo y ancho del país efectuando en su andar, siete asambleas nacionales y elaborando documentos y propuestas que aun tienen plena vigencia en este tiempo. Entre estos documentos, el famoso Pliego de Chile, que por el año 1980 fue presentado a la dictadura con la firma de más de 1.100 dirigentes nacionales y de base. Como consecuencia de ello los dirigentes del ejecutivo de la Coordinadora fueron apresados entre ellos Manuel Bustos, Alamiro Guzmán, Arturo Martínez, Manuel Jiménez, José Verasay y tantos otros. Para todos ellos vaya nuestro sincero homenaje.
La Coordinadora Nacional Sindical abrió un camino de lucha contra la dictadura y de organización de los trabajadores y Manuel Bustos encabezó esa lucha histórica, que sirvió de base para posteriormente crear el Comando Nacional de Trabajadores en el año 1983 y dar paso a las protestas nacionales, que en esos años se convocaron por la CNS y el Comando Nacional de Trabajadores. Sin lugar a dudas, en ese tiempo de dictadura el movimiento sindical abrió un espacio al movimiento social y político en la lucha más abierta por la democracia y desestabilizó al régimen dictatorial de Pinochet.
Son muchas las acciones, movilizaciones y propuestas levantadas por Manuel en conjunto con las organizaciones de los trabajadores, las que ayudaron de manera sustantiva a la unidad del pueblo, que hicieron posible la transición hacia la democracia.
Es tiempo ya que este gran aporte del mundo social y de Manuel sea reconocido plenamente en la sociedad chilena.
El 3 de diciembre 1982 fecha posterior a la brutal represión de Plaza Artesanos, Bustos fue arrestado y expulsado del país junto a Héctor Cuevas, presidente de la Confederación de la Construcción. Fue puesto en un avión con destino a Brasil, y de ahí se trasladó, en calidad de exiliado a Italia, desarrollando en su corto exilio una ardua labor por canalizar la solidaridad a nuestro pueblo, al movimiento sindical chileno y a la lucha opositora contra la dictadura de Pinochet.
Bustos regresó al país en octubre de 1983 y fue recibido con gran alegría por los trabajadores y continuó con su lucha sindical como siempre poniéndose al servicio de su clase y a la vanguardia de la conducción del sindicalismo. Situándose en 1985 a la cabeza de la Coordinadora Nacional Sindical –CNS- nuevamente y del Comando Nacional de Trabajadores (CNT).
En septiembre de 1988 fue elegido por voluntad de los trabajadores –merecidamente- por cierto, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), después de haber estado ocho meses relegado en Parral por infracción a la ley de seguridad interior del Estado.
En 1990 asumió como dirigente internacional, miembro del Consejo de Administración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En las elecciones de 1997, Bustos resultó electo diputado por el distrito 17 —Conchalí, Huechuraba y Renca—, y desde marzo de 1999 encabezó la comisión de trabajo y seguridad social de la cámara baja, desarrollando una gran labor como parlamentario.
Destaca entre sus proyectos, una moción que estableció la obligatoriedad del pago de cotizaciones como requisito al momento del despido de los trabajadores, con el fin de proteger sus derechos y fondos provisionales.
En agosto del año 1998, Manuel Bustos se enteró de que sufría cáncer cerebral, después de someterse a tratamiento, comenzó a tener problemas renales y de coagulación, debido a una descompensación gástrica provocada por las fuertes drogas para su enfermedad. Enfrentó este momento con valor y con fuerza y continuó trabajando consecuentemente por la causa del pueblo trabajador chileno.
Manuel Bustos falleció el día 27 de septiembre de 1999, y el pueblo de Chile, los trabajadores de la ciudad y del campo le rindieron un sentido y merecido homenaje, llenando las calles de Santiago de flores, acompañando su cortejo fúnebre al Cementerio General.
Manuel Bustos fue un hombre valiente, inteligente, consecuente comprometido con la unidad de los trabajadores y del pueblo; luchó incansablemente por los desposeídos, por la libertad, la justicia social, la democracia y el pleno respeto a los derechos humanos.
La figura de Manuel, su legado está en el alma y el corazón de los obreros los campesinos y la clase trabajadora de nuestra patria.
En este nuevo aniversario, cuando se cumplen ya diez años de su fallecimiento queremos, conmemorar y rendirle un sentido homenaje de honor de gloria y de recuerdo a su memoria.
Sin lugar a dudas junto a don Clotario Blest, Exequiel Ponce y Luís Emilio Recabarren está Manuel junto a ellos, en la historia del sindicalismo de nuestra patria, en la memoria social de nuestro pueblo y en el corazón de los trabajadores.
Trabajé junto a otros muchos dirigentes sindicales y sociales con Manuel durante más de 21 años, en la Coordinadora Nacional Sindical, en el Comando Nacional de Trabajadores y en nuestra Central Unitaria de Trabajadores.
Hoy asoma una vez más a mis ojos su figura, llegan a mis oídos sus palabras llenas de contenido y profundidad. Imagino, que de estar físicamente con nosotros, otra vez se hallaría en primera línea, a la vanguardia de nuestra lucha, organizando las fuerzas del sindicalismo, luchando por más igualdad, por más participación, por más democracia, contra el sistema binominal; luchando por un nuevo código del trabajo y una nueva constitución, luchando por la nacionalización del cobre y de las aguas, luchando por más participación social y una mejor democracia, luchando por el pleno respeto a los derechos humanos, Trabajando por acortar las brechas de las desigualdades salariales, luchando por un sueldo ético, por una mejor distribución del ingreso, levantando las banderas de la unidad sin exclusiones, saludándonos con su mano franca y su mirada transparente y diciéndonos con una sonrisa ¡Cómo estás hermano!
HONOR Y GLORIA PARA MANUEL, EL HOMBRE QUE TUVO EL ALMA DE CRISTALES.
Luis Fuentalba Reyes
Consejero Nacional de la CUT
Presidente de la Asociación de Funcionarios de la Tesorería
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