Carta a Giacomo Marasso . Antonio Marquez.

Querido Giacomo:
He demorado en escribirte, pero los sucesos de estos días dan más fuerza a lo que he estado pensando. La falta de opciones claras y precisas de parte de algunos partidos de la Concertación están des-concertando al movimiento que recuperara la democracia en Chile.
Quizás si la ausencia de una idea central, precisa, amalgamadora y fuerte, del camino a trazar, permita el surgimiento de tanto personalismo que con sus coqueteos mediáticos está provocando una crisis que aún es tiempo de evitar.
Cuando la derecha ya tiene un candidato posicionado, aventajando a los "probables" candidatos de la Concertación, se requieren gestos de líder, de esos gestos que te generan confianza instantánea, sueños y esperanzas de triunfo. Creo, en mi modesto parecer, que nuestro buen amigo Edaurdo Frei se la ha jugado por la carrera presidencial, sin titubear, mirando de frente el combate.

Alejado de la DC por años, sin embargo he aportado silenciosamente en cada elección, entregando mi voto a los miembros de un partido del que guardo profundos e inolvidables recuerdos.

Sólo me duele la falta de generosidad de sus dirigentes, envueltos en pequeñas querellas de bandos medievales, de verdaderos Capuletos y Montescos, que pueden llegar incluso al crimen político si no se instaura un segundo de reflexión profunda.

Estamos cansados de defender una Concertación que no da las respuestas que se requieren, porque pareciera importar más el reparto del botín que levantar banderas de lucha comunes a todos, significantes para todos.

En mi opinión, de simple ciudadano no comprometido ni con cargos ni con repartos de pegas políticas, le ruego a la DC que ordene sus filas en torno a una idea central y absoluta: la justicia social, luchando por mejorar la calidad de vida de todos sus ciudadanos.

No en los discursos, sino en la verdad. Los que creemos en el humanismo, no necesitamos militar, pero sí exigimos más claridad, seguridad y convicción en quienes nos demandan después su apoyo.

Creo que Frei ha sido muy valiente, ha planteado temas que a muchos les molesta o les duele, y que debió enfrentar una crisis que desdibujó su gran trabajo como presidente. Y ya es hora de respaldarlo, con fuerza y convicción.
Recibe mi afecto permanente.
Antonio Márquez Allison [+/-] Seguir Leyendo...