domingo, febrero 17, 2008

El triunfo de las ideas. Soledad Alvear Valenzuela. Presidenta del Partido Demócrata Cristiano

El día 21 de enero la comisión organizadora del V Congreso de la Democracia Cristiana —encabezada por nuestra ex ministra Mariana Aylwin— hizo entrega del documento oficial que contiene las conclusiones de este fructífero proceso de más de un año y medio.
Este trascendental documento representa el triunfo de las ideas. Una democracia verdadera requiere de partidos políticos basados en principios, ideales y una clara visión del futuro que proponen al país. Eso es lo que la Democracia Cristiana es, a ello nos comprometemos con Chile.
Este documento representa también un formidable acto de transparencia. Cada ciudadano en el país puede saber, con excepcional precisión, qué está apoyando al votar por un democratacristiano, porque aquel candidato está comprometido y obligado a respetar los acuerdos del V Congreso. Esto fortalece nuestra democracia, y debe ser parte del orgullo de nuestro sistema político.
Hicimos un esfuerzo por interpretar los desafíos del nuevo Chile y creo que lo logramos. Tenemos propuestas que abarcan virtualmente todas las materias más importantes, una visión que nos da identidad, una propuesta que reafirma nuestra vocación progresista y, lo más importante, contamos con metas claras. El desafío ahora es trabajar para alcanzarlas durante los próximos 20 años.
¿Qué metas nos propusimos? Cuatro grandes tareas: construir un país para todos, con más y mejor democracia, con liderazgo internacional, y un país de buena vida humana.
Buscamos construir un país para todos, impulsando una estrategia de desarrollo integral y sustentable que logre la equidad social y el crecimiento de cada uno de los chilenos y chilenas. Un país que se inserta exitosamente en la economía global y asume con fuerza los cambios tecnológicos para desarrollarse integradamente, para derrotar la pobreza y reemplazar la desigualdad por la meritocracia.
Queremos hacer de Chile un país con más y mejor democracia, con instituciones legitimadas, sólidas y representativas del conjunto de toda la sociedad que hagan posible la paz social, la gobernabilidad, el crecimiento económico y el progreso social para todos. Un país reconocido por la calidad de su política. Un país en que esta calidad se exprese también en honestidad y bajos niveles de corrupción.
Aspiramos poner a Chile en un nivel de liderazgo en el ámbito internacional, respetado por su defensa de valores permanentes, por sus logros económicos y sociales, por su independencia y por la búsqueda de acuerdos en el concierto mundial, demostrando que también es posible para un país pequeño integrarse al mundo globalizado con identidad y voz propias.
Nos proponemos hacer de Chile un país con una buena vida humana, donde vale la pena vivir, valorado por el esfuerzo, solidaridad y creatividad de su gente, que construye con optimismo su porvenir y pone siempre en el centro a la persona humana.
Invito a todos mis compatriotas a revisar este documento, disponible en www.pdc.cl. En los 306 párrafos que organizan nuestros acuerdos podrán encontrar respuestas a las preguntas del Chile de hoy y de mañana, a la sociedad que queremos construir, el norte que a nuestro juicio como país debemos seguir. También podrán reencontrar una premisa básica: no somos la derecha, tampoco la izquierda: somos el centro político, reformista y progresista.
Éstas son nuestras ideas con miras al 2027. Ellas se proponen, no se imponen. Con ellas se convence, no se vence. Eso fue lo que nos enseñaron Frei, Leighton, Palma y Tomic. Ése es el espíritu de la DC del siglo XXI.
Con este documento finaliza nuestro V Congreso. Con estos acuerdos humildemente salimos a conquistar el respaldo de nuestros compatriotas. Tenemos fe en lograrlo, porque no es el dinero, no es la demagogia, no es la pirotecnia comunicacional. Es el triunfo de las ideas.