...ESTAMOS CON EL PILOTO AUTOMÁTICO EN MATERIA DE CRECIMIENTO...¡¡¡¡
Joseph Ramos.
Académicos de la U de Chile y Santiago destacan la importancia del Presupuesto 2007 como apoyo al crecimiento del próximo año, especialmente por su componente de obras públicas y vivienda. También llaman a la prudencia en aumentos salariales en las negociaciones con la ANEF y los trabajadores de la salud. No se compran, sin embargo, la teoría de la rebaja de impuestos para impulsar la actividad. La comunidad académica está cada vez más convencida que la economía requiere medidas de cierto peso para reforzar el crecimiento económico del país. Existe el diagnóstico de que el presente año ya se configuró un escenario de desaceleración, por mucho que la autoridad no lo reconozca en esos términos, y se estima que, aun cuando las perspectivas son más alentadoras para el 2007, una parte importante de los estímulos y requisito esencial para la reactivación es un Presupuesto de La Nación acorde con los objetivos de un mayor crecimiento. Para Joseph Ramos, académico de la Universidad de Chile, éste último- el gasto fiscal- es “la” herramienta clave que tiene el Ejecutivo en lo que se refiere a las perspectivas del año entrante. Al respecto acota que “lo más importante es ordenar el naipe, por parte de la Ley de Presupuesto, cuyo proyecto va a anunciarse este mes, en el sentido de determinar claramente de cuánto impulso fiscal estamos hablando y, en segundo lugar, en qué dirección apunta ese gasto; es decir, si estamos hablando de un enfoque fundamentalmente colocado en lo social y dentro de éste, al gasto corriente, o también hacia el apoyo productivo”. En el tema del volumen se ha hablado de una expansión del 8 ó 9%, pero también es relevante saber si estamos hablando de inversiones para el corto, mediano o largo plazo, acota el académico. “Por ejemplo, podemos decir que todo lo que hagamos en educación es para el largo plazo, pero también requerimos inversiones de corto y mediano plazo. No hay que olvidarse del largo plazo, pero se requieren medidas también de corto plazo”, acota. Ramos estima que las medidas anunciadas por el MOPT en el sentido de facilitar la inversión privada en infraestructura van en un sentido correcto y que otro tanto debiera hacer el Presupuesto en lo que se refiere a los planes de inversión pública en materia de obras públicas y vivienda, por ejemplo. Casos ANEF y Salud Ramos advierte que es en esos temas en los que debe enfocarse el presupuesto público del próximo año y los siguientes, si es que se quiere apoyar el crecimiento económico del país, además de lógicamente los esfuerzos en materia social, “pero sería muy triste, por citar algo extremo, que ello fuera más bien a aumentar los sueldos del sector público”. En este sentido, el académico de la U. de Chile dice que por ello debe conservarse la prudencia en lo que son las negociaciones laborales con la ANEF o con los trabajadores de la salud. “Además que lo lógico es que esos aumentos salariales, que pueden ser muy justos, estén ligados a mejoras de resultados, por ejemplo, en los establecimientos educacionales”. Sobre las propuestas para eventuales medidas tributarias que apoyen el crecimiento, como la posibilidad de que pudiera revisarse la tributación sobre las utilidades reinvertidas, Ramos no se muestra demasiado entusiasta con la idea de las rebajas tributarias generalizadas. Más bien cree que debe tratarse de medidas focalizadas por ejemplo, en la pequeña y mediana empresa, lo que considera “perfectamente posible”. Resume: “Soy optimista del año que viene, porque este año ya está bastante jugado, pero eso pasa porque efectivamente la herramienta que tiene el Ejecutivo, que es el Presupuesto, refleje las prioridades gubernamentales, porque hasta aquí estamos funcionando básicamente con el piloto automático que dejó el gobierno de Lagos, ya que no han existido medidas nuevas y ni gastos nuevos, como para juzgar la eficacia de la acción gubernamental”. Apunta, por último, que la situación internacional, a pesar de una eventual lenta desaceleración de EEUU, seguirá siendo alentadora porque este ultimo efecto está siendo compensado por el mayor crecimiento paulatino de Europa y la fuerza que aún muestran las economías como China e India.
Académicos de la U de Chile y Santiago destacan la importancia del Presupuesto 2007 como apoyo al crecimiento del próximo año, especialmente por su componente de obras públicas y vivienda. También llaman a la prudencia en aumentos salariales en las negociaciones con la ANEF y los trabajadores de la salud. No se compran, sin embargo, la teoría de la rebaja de impuestos para impulsar la actividad. La comunidad académica está cada vez más convencida que la economía requiere medidas de cierto peso para reforzar el crecimiento económico del país. Existe el diagnóstico de que el presente año ya se configuró un escenario de desaceleración, por mucho que la autoridad no lo reconozca en esos términos, y se estima que, aun cuando las perspectivas son más alentadoras para el 2007, una parte importante de los estímulos y requisito esencial para la reactivación es un Presupuesto de La Nación acorde con los objetivos de un mayor crecimiento. Para Joseph Ramos, académico de la Universidad de Chile, éste último- el gasto fiscal- es “la” herramienta clave que tiene el Ejecutivo en lo que se refiere a las perspectivas del año entrante. Al respecto acota que “lo más importante es ordenar el naipe, por parte de la Ley de Presupuesto, cuyo proyecto va a anunciarse este mes, en el sentido de determinar claramente de cuánto impulso fiscal estamos hablando y, en segundo lugar, en qué dirección apunta ese gasto; es decir, si estamos hablando de un enfoque fundamentalmente colocado en lo social y dentro de éste, al gasto corriente, o también hacia el apoyo productivo”. En el tema del volumen se ha hablado de una expansión del 8 ó 9%, pero también es relevante saber si estamos hablando de inversiones para el corto, mediano o largo plazo, acota el académico. “Por ejemplo, podemos decir que todo lo que hagamos en educación es para el largo plazo, pero también requerimos inversiones de corto y mediano plazo. No hay que olvidarse del largo plazo, pero se requieren medidas también de corto plazo”, acota. Ramos estima que las medidas anunciadas por el MOPT en el sentido de facilitar la inversión privada en infraestructura van en un sentido correcto y que otro tanto debiera hacer el Presupuesto en lo que se refiere a los planes de inversión pública en materia de obras públicas y vivienda, por ejemplo. Casos ANEF y Salud Ramos advierte que es en esos temas en los que debe enfocarse el presupuesto público del próximo año y los siguientes, si es que se quiere apoyar el crecimiento económico del país, además de lógicamente los esfuerzos en materia social, “pero sería muy triste, por citar algo extremo, que ello fuera más bien a aumentar los sueldos del sector público”. En este sentido, el académico de la U. de Chile dice que por ello debe conservarse la prudencia en lo que son las negociaciones laborales con la ANEF o con los trabajadores de la salud. “Además que lo lógico es que esos aumentos salariales, que pueden ser muy justos, estén ligados a mejoras de resultados, por ejemplo, en los establecimientos educacionales”. Sobre las propuestas para eventuales medidas tributarias que apoyen el crecimiento, como la posibilidad de que pudiera revisarse la tributación sobre las utilidades reinvertidas, Ramos no se muestra demasiado entusiasta con la idea de las rebajas tributarias generalizadas. Más bien cree que debe tratarse de medidas focalizadas por ejemplo, en la pequeña y mediana empresa, lo que considera “perfectamente posible”. Resume: “Soy optimista del año que viene, porque este año ya está bastante jugado, pero eso pasa porque efectivamente la herramienta que tiene el Ejecutivo, que es el Presupuesto, refleje las prioridades gubernamentales, porque hasta aquí estamos funcionando básicamente con el piloto automático que dejó el gobierno de Lagos, ya que no han existido medidas nuevas y ni gastos nuevos, como para juzgar la eficacia de la acción gubernamental”. Apunta, por último, que la situación internacional, a pesar de una eventual lenta desaceleración de EEUU, seguirá siendo alentadora porque este ultimo efecto está siendo compensado por el mayor crecimiento paulatino de Europa y la fuerza que aún muestran las economías como China e India.
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