martes, junio 12, 2012

Mayoría Constituyente.Gonzalo Wielandt


El acuerdo político-programático entre la democracia cristiana y renovación nacional es un acuerdo sólo comparable con el acuerdo nacional en los años 80. El acuerdo por reformas políticas e institucionales son parte de una estrategia de democratización que sólo es posible consolidar con una mayoría política y social que se consagre en una gran coalición pluralista de centro.

Toda pretensión, proyecto e intencionalidad de cambio social y económico depende de una mayoría representativa de centro, hegemonizada por sectores medios, cuyo sentido de bien común es la conciencia por un desarrollo nacional de integración, tanto del pueblo chileno como con el mundo.


La democracia cristiana, en este sentido, tiene una posibilidad de resurrección política. Por cuanto, todo proyecto de avanzada social, de representación comunitaria, de recuperación de los recursos naturales y de energía así como la consolidación de organizaciones económicas responsables, dependen de una mayoría, que a través de reformas a la actual constitución, genere las condiciones y las mayorías futuras para una nueva constitución. Así, los sectores del centro político deben ser responsables en configurar las tendencias políticas que involucren a mayorías, que si bien en el pasado no favorecieron los cambios, ahora sí están dispuestos a participar de ellos.

La izquierda responsable tiene que tener la convicción de que el centro es un actor de vanguardia y por ende confiar en él, asumiendo una línea de sacrificio histórico, consistente en el apoyo al proyecto de cambio gradual que el centro, a través de una coalición pluralista debe llevar a cabo.

Ante este honorable desafío, la democracia cristiana tiene un candidato presidencial. Este candidato es nuestro actual presidente del partido “Camarada Ignacio Walker Prieto”, quien liderando este proyecto de dignificación nacional, es capaz de aunar las voluntades del pluralismo de centro.

Gonzalo Wielandt
Camarada Providencia