Fuerza Cristiana de Combate FCC .Gonzalo Wielandt

Camaradas, el PDC irresponsablemente ha apoyado un paro que ha traído violencia extrema consigo, cuyo resultado máximo fue el intento de incendio de la Iglesia de la Gratitud Nacional. Esta es una provocación inaceptable. Los cristianos debemos responder. Por lo tanto, así, como las autoridades partidarias apoyaron el paro hegemonizado por la extrema izquierda, solicito al consejo nacional que me autorice a formar la Fuerza Cristiana de Combate como grupo de choque para la defensa activa de los principios y símbolos cristianos, a la luz de lo que Maritain denominó como las minorías proféticas de choque. 

Se dan cuenta, esto es lo que se quiere conseguir. Se quiere conseguir la violencia. Sí es eso lo que se busca, lo lograran, y todos sabemos quienes van a perder.  

La democracia cristiana es un partido de vanguardia social-comunitaria que debe consolidar el centro político a través de una política de bien común, o sea, un diseño de vocación nacional y popular. Eso es, entenderse con las autoridades democráticas de la república así como lo intentó Radomiro Tomic cuando en 1978 le propuso al gobierno militar el gobierno de emergencia nacional y la soberbia de la dictadura rechazó su propuesta. Ahora estamos en democracia, con mayor razón, la voluntad de diálogo debe inspirar al PDC, de lo contrario merece la muerte.