Voto Político Junta Nacional PDC. Movimiento Refundación.

Voto Político Junta Nacional PDC

(07 y 08 de enero 2011)

Camaradas miembros de la Junta Nacional PDC.

Venimos en este acto a presentar nuestra reflexión y nuestra propuesta tomando en cuenta los temas que deberían estar presentes en los acuerdos de la Junta Nacional del PDC. Queremos que la reflexión y las acciones tengan una mirada de futuro y de fraterna franqueza para iniciar, de forma eficaz, el período que se viene.

Quienes vengan a esta Junta Nacional pensando que lo central es la mera elección de Consejeros Nacionales se equivocan y no son capaces de ver la dureza del momento que vivimos, la primera tarea hoy día es reflexionar, debatir y definir las acciones que involucren los temas de fondos que se tienen que plantear, siendo este asunto el de mayor importancia para un instrumento político como el nuestro.

En ese sentido queremos mantener y plantear dos temas de fondos, necesarios y vitales, en la discusión y reflexión del PDC.

En primer término impulsar propuestas que eviten los procesos de oligarquización del partido, trabajando férreamente a favor de la democratización de la Democracia Cristiana, ampliando y profundizando la participación de las estructuras regionales y provinciales. En dicho sentido velar siempre porque la DC se mantenga como un partido de oposición y desde dicho rol ejercer clara y responsablemente el rol de fiscalización de las autoridades de la derecha, de defensa de los derechos ganados por los pueblos de Chile y de elaboración de una alternativa de gobierno para el año 2014.

En segundo término, impulsar un debate en la construcción de un modelo de desarrollo alternativo para el Chile del siglo XXI anclado en un rol activo del Estado y de la Sociedad Civil por sobre el Mercado, con el objetivo de posibilitar políticas redistributivas de las riqueza generadas por el país, por medio de una mejora sustantiva de los ingresos de las familias y de los individuos que permita terminar con las precarias condiciones laborales. Un modelo de desarrollo que tenga a la los ciudadanos en el centro de su acción debe permitir un incremento sustantivo de la organización sindical y comunitaria orientada a incrementar la participación directa de la soberanía política en los temas que les conciernen a la sociedad en su conjunto. Este voto político solicita que la Democracia Cristiana incorpore la necesidad de una Asamblea Constituyente anclada en la soberanía de todo el universo social sin exclusión ni pesos relativos, mediante una metodología participativa y comunitaria que recoja ejes temáticos en torno a la protección de los recursos naturales, poniendo especial atención con el cobre, litio y agua; generar políticas de igualdad de oportunidades principalmente en el tema de la educación y la cultura; preocuparse y ocuparse de los temas de género, de los temas de jóvenes, adultos mayores, pueblos originarios; generar un debate sobre el modelo político constitucional chileno; elaborar propuestas programáticas sobre la injusta distribución de las riquezas nacionales; promover la participación y la generación del poder comunitario.

Por lo anterior promovemos los temas del empoderamiento de las de las regiones. Entendemos que la municipalización del país le ha causado un gran daño a la soberanía popular debilitando por medio de la atomización de la esfera de las decisiones a los ciudadanos. Proponemos terminar con la municipalización de la educación y de la salud pública, entendemos que con urgencia el país debe estatizar los servicios de primera necesidad para la población, este paso permitirá avanzar de verdad en la superación de la desigualdad aberrante y vergonzosa que presentamos al mundo. Proponemos terminar con el voluntariado asociado a la industria de la caridad que ha farandulizado a la pobreza y lavado la cara de oscuros políticos, empresarios y animadores de la TV. Exigimos que la superación de la pobreza y demás políticas sociales se sustenten económicamente en los impuestos a las grandes empresas.

Proponemos crear y organizar una red de voluntarios del V Congreso Nacional del PDC que - utilizando diversas herramientas - puedan dar a conocer las conclusiones de dicho Congreso. Además, impulsar la convocatoria al VI Congreso Nacional del PDC y promoverá que el Partido se declare en “Estado de Congreso” para generar las condiciones políticas adecuadas de un debate – desde la oposición – en torno a un modelo de desarrollo alternativo para Chile y la construcción de un nuevo conglomerado político que sea alternativa de gobierno para el proceso electoral del año 2013.

La presencia de los temas país tiene que ser fundamental en los acuerdos de la Junta Nacional, y enfáticamente señalamos que nos declaramos disconformes con el modelo económico y social que predomina en nuestro país y contrarios al modelo político institucional amparado en la actual Constitución Política de Chile - herencia de la Dictadura pinochetista - que mantiene aún las leyes de quórum calificado, entre la que se cuenta la Ley Electoral, sostenedora del sistema binominal de elecciones parlamentarias.

Sin duda estamos frente a una sociedad inestable, excluyente y economicista con una atomización de las decisiones, en pequeños espacios públicos y en cúpulas partidistas, lo cual constituye un obstáculo primordial en la construcción de un Chile justo y democrático. Además, estamos frente a un modelo político que ha promocionado el modelo neoliberal como modelo imperante de nuestra sociedad, colocando al individuo por sobre la comunidad. Los grandes desafíos son resolver la injusta distribución de las riquezas nacionales, la falta de igualdad de oportunidades y la descomposición de la participación comunitaria en el Chile actual.

Por tal razón planteamos que se tiene que definir una política nacional de protección de las riquezas nacionales, planteamos la renacionalización del cobre como un tema a debatir en el partido.

Proponemos cambiar el eje de las políticas públicas hacia la igualdad de oportunidades, y en ese sentido planteamos consolidar la educación pública como una posibilidad concreta de igualdad de oportunidades; planteamos que se acuerde un compromiso de no cerrar más colegios municipalizados mientras no se realicen las reformas de fortalecimiento de la educación pública; y que se rechace la Reforma Educacional impulsada por Lavín por la forma inconsulta y el fondo privatizador de la normativa legal propuesta por el gobierno derechista que no hace más que profundizar las inequidades.

Creemos que se debe iniciar un debate serio y profundo sobre una verdadera regionalización del país promoviendo regiones con autonomía financiera y política; con poderes ejecutivos y legislativos elegidos mediante votación popular, preocupándose de las comunas pequeñas que no sean absorbidas en su gestión y autonomía por las capitales de regiones y/o provincias.

Es imperativo impulsar reformar legales que establezcan una verdadera participación comunitaria, retomando el legado político de la promoción popular y transformándolo en un impulso hacia el siglo XXI de una propuesta de poder comunitario.

Se requiere potenciar un Estado de Chile fuerte y moderno donde su rol fiscalizador y empresarial sea redefinido.

El PDC debe promover una reforma laboral que considere la negociación colectiva interempresas, el fortalecimiento de la organización sindical y la eliminación del reemplazo de los trabajadores después de 15 días de huelga legal.

Se debe debatir una reforma tributaria que incorpore elementos de equidad; de incentivos a la pequeña y mediana empresa y de mayor carga tributaria a las grandes empresas.

Debatir una política energética que considere las energías alternativas y sustentables con el medio ambiente.

Definir una política pública que considere las demandas de los pueblos originarios, su marginación cultural, su autonomía organizacional y su real incorporación al desarrollo nacional.

Por otro lado, impulsar una nueva Constitución que recoja los principios de un Estado verdaderamente democrático, plurinacional, intercultural y comunitario donde sea replanteado el “orden público económico constitucional” en base a un Estado social, solidario, activo, pluralista e integrador.

También planteamos que nuestro partido debe volver a ser un partido popular y nacional. Definitivamente enfrentar los conflictos de intereses entre política y negocio al interior del PDC. Es por esto que debemos promover una profunda modificación de los Estatutos, una completa revisión de los padrones de militantes, una modernización de las estructuras y comunicaciones internas y el reimpulso los acuerdos del V Congreso del PDC como una carta de navegación política.

Señalamos la construcción de un nuevo conglomerado político, que deje definitivamente atrás lo que fue la Concertación de partidos por la democracia, que se construya con todos aquellos actores que estén dispuestos a debatir un modelo alternativo de desarrollo político, social y económico. Señalamos la construcción de una nueva mayoría social y política para Chile; proponemos refundar el instrumento de transformación social que es la Democracia Cristiana superando la cultura oligarca reinante en nuestro partido.

En definitiva, en esta nueva etapa el PDC deberá estar atento y en alerta a los desafíos que enfrentaremos. El partido no debe aceptar ninguna señal de acercamiento hacia la derecha. Debe promover la activa participación de las bases DC y continuar promoviendo las transformaciones sociales, políticas y económicas que este país necesita.

Finalmente, debe impulsar nuestra propuesta de la unidad social y política del pueblo de Chile a través de un PDC popular y nacional.

Fraternalmente,

Fabiola Yanquez Vidal

Carlos Dupré Contador

Manuel Miranda Juárez

Leonel Sánchez Jorquera