martes, diciembre 16, 2008

DESAMPARO PROFESIONAL FRENTE A EMPRESAS CONTRATISTAS QUE PRESTAN SERVICIOS A CODELCO.Eduardo Silva Gutiérrez.Presidente PDC Codegua


Codelco, en el marco de la relación que mantiene con sus empresas contratistas, exige de ellas el más estricto cumplimiento de sus obligaciones laborales y previsionales, y fomenta mejores condiciones contractuales y de desarrollo de las personas, entre las que se destacan contratos de trabajo de duración indefinida, pago de indemnización a todo evento (IAS), reajuste de remuneraciones, seguros de accidentes personales, etc.
En este sentido, Codelco ha incorporado progresivamente en las bases de los llamados a licitación, la exigencia que el Contratista contrate a su personal de forma indefinida (servicios de largo plazo, superiores a 12 meses), reajuste sus remuneraciones en forma semestral, traspasando con ello el ajuste de precios del contrato entre las partes, etc. Asimismo, en los procesos de evaluación ha privilegiado a quienes han ofertado mayores remuneraciones para su personal y han establecido planes de capacitación y desarrollo personal.

Como consecuencia de lo anterior, los trabajadores han mejorado sus condiciones de trabajo, no obstante persisten malas prácticas por parte de algunas empresas contratistas, que no han entendido el propósito de los objetivos enunciados en el primer párrafo.

En particular se puede constatar, que ciertos empresarios persisten en obtener ventajas comparativas en relación a su competencia, con el objeto de adjudicarse algún proceso de licitación, mediante el uso de malas prácticas laborales.

Dentro de estas malas prácticas, se señala a modo de ejemplo, las acaecidas en el Contrato N° 4500639958 “Servicios de Asesoría Profesional en Gestión de Abastecimiento Proyectos”, entre Codelco y la empresa Guerrero y Céspedes Ingeniería Ltda.:

- No pago de indemnización proporcional por años de servicio: El contrato contempla la provisión de indemnización por años de servicio, valor que ha sido cancelado por Codelco al Contratista como parte de la tarifa unitaria de los distintos profesionales que prestan el servicio, no obstante dicha provisión durante la ejecución de los trabajos y en su término, no ha sido traspasada a los profesionales, ni devuelta a Codelco, constituyendo de esta forma utilidad para el Contratista.

- Traspaso tardío del reajuste del contrato a las remuneraciones de los profesionales: Si bien las bases de licitación establecían reajustar las remuneraciones en forma semestral de acuerdo a la variación del IPC, al igual que el contrato, el Contratista desfasó su aplicación.

El citado contrato por los servicios de asesoría profesional, el cual finalizo el pasado 30 de noviembre de 2008, fue sucedido por un servicio de similares características, adjudicado a la misma empresa contratista, el cual considera al igual que el primero, provisión de indemnización.

Las malas prácticas antes indicadas, sumado a las condiciones bajo las cuales se adjudicó nuevamente el servicio (nivel remuneracional bajo el mercado y déficit de recursos profesionales), ha provocado el descontento de muchos profesionales y su desvinculación definitiva de la empresa, sin ningún tipo de pago por concepto de indemnización, lo cual ha repercutido además, en la calidad de los servicios prestados a Codelco.

Expresado lo anterior, se ha solicitado tomar las medidas pertinentes para concretar el espíritu que Codelco ha fomentando en el último tiempo con sus empresas contratistas, tendientes a establecer una línea común respecto de los beneficios que deben ser traspasados a sus trabajadores, caso contrario, analizar la procedencia de descontar la provisión antes señalada, por constituir un detrimento en el patrimonio de Codelco.

Sin duda alguna, el problema planteado contradice los principios que ha impulsado Codelco, y sobre todo da una sensación profesional de desamparo frente a la ambición de ciertos empresarios con deseos de enriquecerse sin reparar en ningún medio, que en definitiva provoca descontento que desfavorece la empresa estatal mas importante de Chile y que repercute obviamente al Gobierno, atentando contra nuestra nueva opción presidencial, por existir muchas dignidades profesionales abatidas. En este contexto, es muy difícil trabajar para posicionar a nuestro Precandidato Presidencial sin ser cuestionado por el desamparo y desilusión política existente.
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