Accidente en Panamá. Columna de opinión.
En la entrega del informe preliminar sobre el accidente que costó la vida del General Bernales y a la comitiva chilena que lo acompañaba en su visita oficial a Panamá, el ministro de Justicia y Gobierno de ese pais, señaló que aún se encontraba pendiente el informe de la empresa constructora de los motores del helicóptero.
No es posible emitir una conclusión sobre la causa del accidente, sin conocer el peritaje técnico que debe realizar el fabricante de las turbinas, la compañía canadiense Pratt - Whitney y que formó parte de la investigación.
Las pericias deberán acreditar las causas de la paralización de una de las turbinas, lo que podría constituirse en la causa basal y originaria del accidente y que gatilla otras causas accesorias sobrevinientes en una falla multifuncional de diversos elementos y mecanismos de control y navegabilidad del helicóptero.
El exámen pericial determinará el cumplimiento de las normas de> mantenimiento de las turbinas conforme a los manuales técnicos del fabricante,considerando una antiguedad de treinta años de vida útil, lo que obliga a una mayor frecuencia en las inspecciones y checks periódicos, en relación a las horas de vuelo y podrá verificar además eventuales signos de fatiga de material y obsolecencia.
La revisión de la bitácora de mantenimiento dará luces sobre el debido cumplimiento por parte de usuario, en este caso, el Gobierno de Panamá, de> la normativa del fabricante para garantizar la seguridad aérea en conformidad a las regulaciones de la OACI y a las certificaciones internacionales.La pericia SOAP será muy relevante para determinar la existencia de partículas metalicas en las turbinas que reportan un alto nivel de desgaste y corrosión de piezas, partes y componentes que pudiera haber causado la falla mecánica y sería una demostración fidedigna de una falta de mantenimiento oportuno, originando las responsabilidades consiguientes y las reparaciones civiles en conformidad al Derecho Internacional.
Nelson Hadad Abogado
Ex Subsecretario de Aviación
No es posible emitir una conclusión sobre la causa del accidente, sin conocer el peritaje técnico que debe realizar el fabricante de las turbinas, la compañía canadiense Pratt - Whitney y que formó parte de la investigación.
Las pericias deberán acreditar las causas de la paralización de una de las turbinas, lo que podría constituirse en la causa basal y originaria del accidente y que gatilla otras causas accesorias sobrevinientes en una falla multifuncional de diversos elementos y mecanismos de control y navegabilidad del helicóptero.
El exámen pericial determinará el cumplimiento de las normas de> mantenimiento de las turbinas conforme a los manuales técnicos del fabricante,considerando una antiguedad de treinta años de vida útil, lo que obliga a una mayor frecuencia en las inspecciones y checks periódicos, en relación a las horas de vuelo y podrá verificar además eventuales signos de fatiga de material y obsolecencia.
La revisión de la bitácora de mantenimiento dará luces sobre el debido cumplimiento por parte de usuario, en este caso, el Gobierno de Panamá, de> la normativa del fabricante para garantizar la seguridad aérea en conformidad a las regulaciones de la OACI y a las certificaciones internacionales.La pericia SOAP será muy relevante para determinar la existencia de partículas metalicas en las turbinas que reportan un alto nivel de desgaste y corrosión de piezas, partes y componentes que pudiera haber causado la falla mecánica y sería una demostración fidedigna de una falta de mantenimiento oportuno, originando las responsabilidades consiguientes y las reparaciones civiles en conformidad al Derecho Internacional.
Nelson Hadad Abogado
Ex Subsecretario de Aviación
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