viernes, noviembre 30, 2007

Dirigentes DC: Conflicto de grupos está llevando a destrucción del partido

En una carta firmada por Osvaldo Artaza, Andrés Palma, Guillermo Pickering, Felipe Sandoval, Marcelo Trivelli, Raúl Donckaster y Germán Acuña, afirman que ''estamos frente a grupos que no tienen voluntad de construir acuerdos'' y que ''en el afán de conseguir el control interno no se ha trepidado en dejar de lado valores cívicos indispensables''. Una fuerte crítica a las últimas directivas de la Democracia Cristiana (DC), en el marco de la crisis por la que atraviesa la colectividad tras la petición de la mesa directiva de expulsar al senador Adolfo Zaldívar, hicieron ex ministros y otros altos dirigentes de la colectividad. La misiva, a la que tuvo acceso El Mostrador.cl, está firmada por dirigentes que pertenecen a distintas corrientes internas: los ex ministros Osvaldo Artaza (Salud) y Andrés Palma (Mideplan, además fue diputado); los ex subsecretarios Guillermo Pickering (Interior y OOPP), Felipe Sandoval (Pesca, además fue vicepresidente de Corfo); el ex intendente Marcelo Trivelli y los dirigentes Raúl Donckaster y Germán Acuña. Bajo el nombre de “Hay que renacer, perdón y nunca más, frustración, dolor y pérdida”, los militantes de la DC afirman que en este caso “estamos frente a grupos que no tienen voluntad de construir acuerdos y son incapaces de superar sus diferencias históricas que se arrastran por casi 40 años” “Quienes firmamos esta declaración nos sentimos frustrados por el fracaso de la forma actual en la que se practica la política y por la situación extrema en la cual se encuentra nuestro partido. En este escenario de conflicto nadie gana, más aún, todos perdemos y eso le hace mal a Chile y a su gente”, agregan. A juicio de los firmantes, este “ha sido un proceso largo, en el cual una seguidilla de errores ha llevado a que el deterioro de la convivencia se trata de recomponer por la vía de la imposición, desde uno y otro lado”. A la hora de analizar cómo se llegó a la actual situación, los dirigentes consideran que “en este permanente conflicto se han destruido mutuamente y están llevándonos a la destrucción del Partido Demócrata Cristiano. En los últimos 15 años, figuras como Valdés, Foxley, Alvear y Zaldívar, entre otros, han caído victima de la mezquindad de unos y otros". Y enfatizan que “el campo de batalla ha sido la estructura del Partido Demócrata Cristiano y en el afán de conseguir el control interno no se ha trepidado en dejar de lado valores cívicos indispensables para aunar voluntades tras un objetivo común de equidad, seguridad y oportunidades”. En este escenario, hacen un llamado a que dentro de la DC se haga “una profunda reflexión personal de cada militante y dirigente de nuestro partido y los invitamos a asumir con humildad los errores del pasado, por no haber hecho todo lo que podíamos para impedir estas malas prácticas políticas y a comprometernos a que nunca más sucedan. Nosotros desde ya lo hacemos”. Concluyen sosteniendo que “tenemos plena fe y ratificamos la vigencia de los principios humanistas cristianos y creemos que apegados a ellos, reviviéndolos, el Partido y todos los militantes podremos volver a prestar al país el servicio que los chilenos se merecen”.