viernes, noviembre 30, 2007

Alvear planea mantenerse a la cabeza del partido y complica opción de Frei

Si bien el presidente del Senado evalúa alzarse como la figura de consenso para liderar la DC una vez que expire el periodo de la directiva actual, fuentes alvearistas sostienen que la idea es que la parlamentaria se mantenga en su cargo. En tanto, diputados colorines descartaron apoyar censura a la mesa de la Cámara. Pese a que la disputa entre la directiva de la Democracia Cristiana (DC) y el senador Adolfo Zaldívar está al rojo vivo, en la colectividad continúan con el calendario de trabajo estipulado previamente. De hecho, este viernes se cierran las inscripciones de los precandidatos para los comicios municipales, lo que tiene a los líderes falangistas –de todas las vertientes- trabajando activamente en la concreción de las postulaciones. Es que en la estructura de la DC se insiste que la colectividad sigue funcionando de manera normal, a pesar del episodio que tiene a sus dirigentes dando la imagen de que el partido se encuentra en punto de quiebre. Por ello, colorines y alvearistas no han tenido muchas posibilidades de encuentro, pues la mayoría de los parlamentarios se encuentra en sus distritos viendo cuestiones internas. Mientras, cada sector monitorea intensamente la evolución de los hechos y hace sus cartas de navegación. Costo inevitable Si bien el presidente del Senado, Eduardo Frei, evalúa la posibilidad de alzarse como figura de consenso y liderar una mesa de unidad, lo cierto es que tiene poco margen de maniobra, pues se topa directamente con la planificación de la mesa directiva que planea permanecer, con Soledad Alvear a la cabeza, más allá de abril del próximo año. En abril del 2008, la DC tiene que insertarse en un proceso de elecciones internas y, en ese contexto, se había planteado la posibilidad de una mesa de consenso para que la senadora se concentrara en sus aspiraciones presidenciales. Sin embargo, fuentes del partido afirman que existe un 99% de posibilidades de que Alvear opte por ir a la reelección. De hecho, fuentes alvearistas explican que tradicionalmente, cuando se está en periodos electorales –como el que empieza el 2008-, la Junta Nacional le pide a la mesa directiva que se mantenga en su cargo para enfrentar los comicios. Es poco probable que los colorines no presenten una candidatura a dirigir el partido. Ante ese escenario, los cercanos a Soledad Alvear no dudan en señalar que, de ser así, competirán. Es que en el alvearismo existe certeza de que si hay elecciones internas, se van a imponer, pues sacan cuentas de que actualmente tienen alrededor del 70% de respaldo en el partido. La idea es mantener a Alvear a la cabeza de la DC hasta que haga una definición presidencial oficial, ella de un paso al lado y deje a figuras cercanas a cargo de administrar la mesa. Ello, dejaría a Frei en un difícil escenario, pues si quisiera encabezar la colectividad tendría que enfrentarse directamente en una elección con Alvear, escenario que, según los alvearistas, favorece holgadamente a esta última, pues el presidente del Senado no tiene trabajo en las bases del partido y tiene escasa representación en el Consejo y la Junta. En cuanto a Andrés Zaldívar, los afines a la directiva lo ven como un aliado, que difícilmente hará una operación que perjudique a la timonel DC. A pesar de tanto análisis positivo, entre los cercanos a la presidenta de la falange hay conciencia de que la decisión de pedir la expulsión de Adolfo Zaldívar puede tener efectos negativos en lo inmediato desde el punto de vista de la imagen pública de Soledad Alvear. Sin embargo, enfatizan que era necesario tomar una decisión de esta naturaleza, pues con la actitud del líder colorín dentro del partido, difícilmente hubieran podido catapultar la opción de la senadora para La Moneda. En este juego del “todo por el todo”, explican que era mejor tomar esta decisión ahora, cuando aún falta tiempo para las definiciones presidenciales, para asumir los costos inmediatos de este hecho y luego revertirlos en el tiempo. “Dos años es mucho tiempo”, se sostiene. Colorines y el Transantiago En el otro lado de esta polémica, los diputados colorines resolvieron que no respaldarán la censura a la mesa de la Cámara de diputados que se votará el martes de la próxima semana, una vez que se retomen las actividades en el Congreso. Si bien en un comienzo se había señalado que votarían a favor de la censura, en vista de lo sucedido con Adolfo Zaldívar, la disidencia puntualiza que ellos no iniciarán una ofensiva en lo político si no en los temas ciudadanos. Consultada al respecto, la diputada Alejandra Sepúlveda afirmó que van a apoyar a su correligionario que preside la Cámara Baja, Patricio Walker. La parlamentaria explicó que “en los temas ciudadanos, nosotros vamos a seguir evaluando cómo se tiene que votar, en los temas que sean consecuencia para la vida cotidiana de las personas”. Según explican fuentes ligadas a los colorines, en el plano legislativo estudiarán profundamente el informe de la comisión investigadora sobre el Transantiago, pues ése es el tema que seguirá siendo central en su acción. Así, si no quedan satisfechos con el informe que apoye la Concertación, ellos no concurrirán con sus votos. Otro aspecto que está en análisis es pedir la convocatoria de la Junta Nacional para analizar el caso de Adolfo Zaldívar, para lo cual requieren el apoyo de un tercio de los integrantes de esta instancia. Sin embargo, ello conlleva ciertas dificultades, pues quien debe convocar a la Junta es el secretario nacional del partido y, por otra parte, el resultado de un encuentro de esta naturaleza es totalmente incierto para los colorines, pues la mesa directiva cuenta con un fuerte apoyo de los representantes. Difícil una conciliación En la mesa directiva no cayó bien la posibilidad planteada por la defensa de Adolfo Zaldívar de pedir a los senadores de la Alianza que firmaron el documento contra las platas del Transantiago, que testifiquen ante el Tribunal Supremo de la DC. El secretario nacional del partido, Moisés Valenzuela, señaló que es “lamentable ese tipo de declaraciones”, e indicó que “en la cuestión política esto sólo viene a demostrar que Adolfo Zaldívar y las personas que opinan favorablemente a Adolfo Zaldívar, no tienen idea lo que significa la construcción de un partido político, si llegan al límite de plantear que dirigentes de otros partidos pudieran eventualmente venir a declarar, eso demuestra claramente el desprecio con la institucionalidad partidaria y por las funciones del partido”. En cuanto a la petición hecha por ex miembros del Tribunal Supremo de la DC, de que antes de resolver sobre la expulsión de Adolfo Zaldívar cite a una conciliación entre la directiva y el parlamentario, Valenzuela sostuvo que “la mayoría sustancial del consejo nacional del partido, el 80% de sus miembros, y la unanimidad de la directiva nacional ha tomado la decisión de poner estos antecedentes ante el Tribunal Supremo... aquí no se trata de dos personas que están peleando, que uno pudiera llamar y decir concíliense”. En este contexto, este lunes se reunirá el Tribunal Supremo de la DC para resolver la admisibilidad de las presentaciones de la mesa contra Adolfo Zaldívar y si confirma la decisión de expulsarlo del partido.