viernes, septiembre 28, 2007

Vuelven los temas de fin de semana.....la sexualidad...( los piden ....45,8 %..)...cespinoza.

Sexo y Eyaculación.

El hablar de sexo puede incluir muchísimas actividades y aspectos. Generalmente, el término se emplea de una forma bastante imprecisa. En dependencia de la situación y contexto, puede tratarse de un beso apasionado, así como de una serie de caricias en las partes más íntimas, del coito o incluso del orgasmo, la eyaculación...
Una relación sexual puede variar en cuanto a lo que incluye. Para algunas personas, sólo puede hablarse de relación sexual si implica coito. Un claro ejemplo de esto fue ilustrado por Bill Clinton cuando afirmó no haber tenido sexo con Monica Lewinsky. Aparentemente, para él una felación no significaba sexo necesariamente.
En cualquier caso, en esta ocasión nos queremos centrar en el tema de la eyaculación y la actitud que muchos varones tienen con respecto a ésta. No todos los hombres cuentan con la misma capacidad para demorar su eyaculación todo el tiempo que desean. La respuesta sexual que tiene cada persona, la cual implica −entre otras cosas− la excitación, es algo bastante particular y que varía de individuo a individuo.
Para un gran número de varones, el momento de la eyaculación marca −de una forma casi inapelable− el final de las relaciones sexuales. Sin embargo, esto no tiene porque ocurrir así. En muchos sentidos, la eyaculación −y para ese caso, el orgasmo− es tan sólo un elemento más de las relaciones sexuales y no tiene porqué determinar el final de éstas, especialmente cuando ha llegado antes de lo que se deseaba.
Si la eyaculación llega demasiado rápido y se asume una actitud negativa, la oportunidad de seguir disfrutando del encuentro sexual se ve truncada. Una actividad que en principio era placentera y positiva llega a tornarse frustrante y negativa −cuando en realidad no existe una razón para que acabe el disfrute−. De hecho, si se asume una actitud distinta se puede seguir gozando del sexo y cabe la posibilidad de que haya alguna eyaculación más. Y si no la hay, lo que sí habrá es la oportunidad de seguir pasando un buen rato.