lunes, mayo 14, 2007

...Una paja al aire....S.Alvarez.

Estimado Daniel:
Caminábamos por calle Aníbal Pinto, en Coquimbo, desde el centro y como quien va hacia el llano, a la altura de la escuela del mismo nombre, cuando nos pusimos de acuerdo en que llevaríamos adelante un diálogo, ya no sólo para nuestros oídos, sino que para esos tres mil y más receptores del blog yankee1000. Y quisimos hacerlo en este blog pues la página del pdc no es apta para ello, es institucional, y como todo lo institucional es pesado, no funciona. Esa página, aún cuando es una página web como todas las páginas web, es vertical, impide el diálogo franco. Como todas las páginas institucionales está para cantar loas al poder reinante. Mientras que el blog de nuestro ya amigo, Carlos Espinoza, es ágil, no censura nada y se presta maravillosamente para discurrir la vida. Así que gracias Carlos. Daniel y yo, en el tiempo, iremos dialogando la política… y esperamos que se nos sumen algunos amigos de Coquimbo y La Serena. Por ciento que el alcance de la web es planetario y pueden todos intervenir en este diálogo que mantendremos, incluso George W., si quiere, claro.
¿Qué dónde se nos perdió el rumbo? En realidad amigo, nunca ha habido rumbo, ninguna carta de navegación. Todas son ilusiones. Es que si como humanidad no sabemos de dónde venimos y para donde vamos ¿cómo es que algunos proponen a otros, con cara seria, la dirección a seguir? Por pura patudez, claro está. Vamos aprendiendo de a poco, encontrando perlas en el camino que hoy llaman sabiduría ancestral, juntándolas y tratando de atisbar a través de ellas el destino que nos espera. Pero no faltan los que se inventan algunas ideas y con cara de fanático nos dicen lo que hay que hacer. ¿te acuerdas del caso de Patricio Walter, diputado por esta zona? Con cara de que algo en su interior le pasaba amenazaba con renunciar a la DC y a la Concertación si es que se dialogaba sobre temas valóricos en el congreso. Pero no bastó que tuviera al alcance la presidencia de la cámara de diputados para que se desdijera de todo y se apareciera como el campeón del diálogo…, todo por la fama. Siempre en la política hay como un sentido de urgencia: hoy la tarea del día es proclamar a la Alvear porque si no algún mal nos caerá encima. En los sesenta Frei Montalba nos salvaba de algo y hacia su revolución. Luego vino Allende, con la misma urgencia, a salvarnos de Frei Montalba; y llegó la derecha a salvarnos de Allende, para que la Concertación nos salvara del vejete criminal. ¡Dios!, ¿quién nos salvará de la Concertación? Por lo pronto la senadora Evelyn Mattei nos salvó del alcalde Velásquez, pero ¿y quién nos salvará de la Evelyn? Y así vamos de salvataje en salvataje, todo con un sentido de urgencia, porque si no algo sucederá. Grupo, mentiras, maquinaciones. Rumbo si hay no lo conocemos. El mundo como que tienen una dinámica propia cuyo origen y fin se nos escapa. Todo lo demás es una paja al aire, como tu bien dices.