Bachelet debe estar profundamente frustrada porque la metieron en una locura

Después del encontrón que tuvo con el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, en el Senado, el parlamentario por Aisén explica su malestar con la postura del gobierno en materia económica y la aplicación del Transantiago. Además, advierte que si no hay una pronta solución, el país puede caer con un conflicto social con consecuencias impensables para la Concertación y La Moneda. Más tranquilo y haciendo un análisis más profundo del impasse que protagonizó con el ministro de Hacienda, Andrés Velasco, en el Senado, al terminar la discusión del proyecto de ley de depreciación acelerada que patrocinó el Ejecutivo se encuentra el senador de la Democracia Cristiana (DC) Adolfo Zaldívar. El parlamentario, quien con vehemencia increpó a Velasco, explicó sus razones por las que actuó de esa manera, señalando que no entiende "cómo llega a ser ministro de Hacienda una persona que es liberal, que no conoce la realidad del país y no quiere entender la complejidad social en la que estamos". En su oficina de calle Miraflores en Santiago, el ex presidente de la DC manifestó que en los últimos proyectos de ley y propuestas que ha presentado el Ejecutivo (como la del contralor y la depreciación acelerada), él se ha pronunciado en conciencia y pensando en la ciudadanía. -¿Más tranquilo después del encontrón que tuvo con el ministro de Hacienda?-Yo creo que se ha llegado a una situación límite, donde hay una tecnocracia que ha avanzado sobre la base de un poder transversal dentro de la Concertación y también, de alguna forma, respaldado por algunos grupos económicos, claramente poderes fácticos, que han impuesto un modelo contrario a lo que es nuestra realidad y a la gente. Cuando uno toma conciencia de esto, por cierto que políticamente no puede respaldar una situación tan absurda y mala para la sociedad. Y en definitiva hay una colisión que es inevitable entre quienes tienen una visión tecnocrática y transversal, los cuales se escudan en una lógica económica, y quienes tenemos una visión del Chile real y que estamos cercanos a la gente. -¿El proyecto debe ser modificado completamente?-Es que esta situación va más allá de los pequeños y microempresarios, de la clase y de sectores populares. Cuando el país tiene todas las posibilidades de crecimiento, nadie se explica que del año ’98 hasta hoy hacia delante dicha dinámica ha sido tan inferior a lo que hubo durante 1997, y teniendo todo a favor porque hay como nunca buenos precios de las materias primas (cobre), una balanza comercial favorable, grandes reservas y las cuentas públicas absolutamente sanas... Entonces si uno le quita el precio del cobre al crecimiento, éste sería de alrededor de un dos por ciento en el país. ¿Algo no se ha hecho bien? Agregando a esto que estamos con una distribución de la riqueza que realmente es injusta, irritante y una de las peores del mundo y, en consecuencia, uno se pregunta ¿qué sentido tiene todo esto? El gobierno ha mandado tres proyectos en este sentido, los cuales a mí parecer no tienen una dirección correcta porque poseen un mal diagnóstico. Aquí hay un mundo de pequeños y medianos empresarios que significan más del 80 por ciento del empleo y una parte importante del Producto Geográfico Bruto, el que está tremendamente lesionado en términos económicos. Hay un alto porcentaje de ellos que está muy endeudado que participa a media o nada, mientras que hay otros que han sido destruidos por las exportaciones y la economía del país, la cual, en definitiva, se basa hoy día en los préstamos a las personas y al consumo y no en facilitar ayuda a este sector tan relevante. -¿El ministro de Hacienda ha sido intransigente?, se lo pregunto por la actitud que ha tenido, ya que, al final, obedece a la política económica implementada por la Presidenta de la República-Yo no me explico cómo llega a ser ministro de Hacienda una persona que es liberal, que no conoce la realidad del país y no quiere entender la complejidad social que tenemos. Y en consecuencia, esos son los resultados y lo que a mí parecer ha faltado en los partidos de la Concertación es debatir estos temas y me violenta que una persona así se sienta con la libertad de seguir imponiendo un modelo como lo ha hecho hasta ahora. -Pese a que usted no es el único parlamentario de la DC que cuestiona al ministro Velasco... (interrumpe)-Bueno, este ministro de Hacienda se ha dado el lujo de no contestarle una carta a 12 diputados de la DC. Además, se ha dado el lujo de ningunear a 20 economistas de centroderecha, los cuales tienen una gran experiencia en su área y se ha dado el gusto por ejemplo en el tercer proyecto de ley que envía de rectificación económica, en el que no invitaron a ningún dirigente de las pymes. Ahora si eso no es soberbia, yo no sé de qué estamos hablando. "Este es un problema que cruza a todos los partidos" -Sin embargo, hay parlamentarios del PPD y del PS que defienden al ministro y aseguran que no se puede estar en contra de una autoridad de gobierno porque la Concertación es una sola. ¿Qué responde a eso?-Este es un problema que cruza a todos los partidos y en consecuencia lo que estoy denunciando es que aquí hay una suerte de tecnocracia que se ha hecho del poder sobre la base de pasar a llevar a las colectividades, las cuales en la actualidad no están realmente asumiendo lo que le corresponde. Pero para mí lo más grave de esto es que ha pasado a llevar a la gente y una gran muestra de ello es el Transantiago. El ministro de Hacienda y otros secretarios de Estado son responsables de llevar adelante este plan, e incluso esto venía de la administración de Ricardo Lagos, donde esta tecnocracia se hace fuerte fundamentalmente a partir del año '98 por la incapacidad de los partidos... (silencio) y han llegado a cosas tan demostrativas que terminan imponiéndole a la Presidenta un proyecto que ella no quería. -¿Qué le parece que la mandataria haya atribuido a información errónea la partida del Transantiago?-Yo creo que Michelle Bachelet ha dicho una gran verdad. Esta tecnocracia le impone a la Presidenta un proyecto que venía desde Lagos hacia delante, donde no había nada contundente para dar ese paso y un ejemplo claro de ello se ve a simple vista, ya que no estaban las calles habilitadas, no se habían construido los paraderos, no estaba el software, no tenían preparado los choferes, no había un sistema antes de subir y no habían consultado a los dirigentes sociales. Además de esto hacen un proyecto sobre la base de un modelo que demuestra que no encaja con la realidad, porque estaba originado para cuatro mil buses, ahora hay cinco mil y no se descarta poner otros mil en las calles y que en el fondo se traduce en que miles de santiaguinos han perdido su calidad de vida. -¿La Presidenta debe dar la cara por Lagos y otros?-Ello es la mejor muestra que esta tecnocracia le hace daño al país cuando no existe un control político. Dañan a la Presidenta de la República en términos increíbles y a toda la sociedad chilena. -¿Pero quién entonces debe poner la cara...?-Ella pone la cara injustamente y no se resuelve el problema de la gente. El Transantiago es un buen ejemplo sobre cómo ha actuado esta tecnocracia. "He votado en conciencia" -Algunos diputados DC manifiestan que la Presidenta de la República debería entender el mensaje de la DC y tomar una decisión respecto al ministro. ¿Usted comparte eso?-Yo no quiero que esto se personalice. La verdad de las cosas es que el señor ministro de Hacienda es uno más del gobierno, porque aquí el problema es la política económica. El país ha progresado, pero creo que la insatisfacción de la ciudadanía nunca había sido tan grande. Hay algo que no está bien hecho y en definitiva en la sociedad chilena hay un problema de fondo muy grande y veo a una coalición de gobierno agotada de verdad, donde el reclamo que hacen es ‘mira, actuemos con lealtad’... -¿No teme ser calificado como desleal, considerando que en los últimos proyectos de ley presentados por el gobierno usted ha votado en contra?-Yo he apoyado a la gente, he votado en conciencia y creo que la forma que tengo de escudarme de mí accionar es ésta. Por lo demás, yo fui tremendamente consecuente y leal al respaldar a Bachelet, pero no la apoyé para esto y creo que ella debe estar profundamente frustrada porque la han metido en esta locura. Creo que hoy empecinarse en continuar agravando las cosas es la peor deslealtad que uno puede tener con la Presidenta de la República, entonces ahí está mi lealtad (en decir las cosas), lo otro es tener lealtades mal entendidas. -Sin embargo, la presidenta de la DC, Soledad Alvear, dijo que la lealtad con la Presidenta se demuestra en las buenas y en las malas…-Bueno, esa es su visión y no me quiero referir a la presidenta de la colectividad. -¿No la comparte porque no ha sido desleal?…-Yo creo que Michelle sabe la lealtad con la que yo la respaldé en su candidatura y ayer (miércoles) ella me agradeció que asistiera a la comida en Cerro Castillo, y me dice que sabía del conflicto que habíamos tenido en el Senado, pero yo digo que ello fue inevitable. Si estamos ante una forma de ir aplicando las cosas que creemos, se le está haciendo un daño tremendo al país y ante eso yo no puedo tener una actitud cómplice, además porque veo cómo se está provocando el error, porque si no hay un cambio las consecuencias de esto serán tremendamente lamentables porque vamos a llevar al país a un conflicto social de imprevisibles consecuencias. -Algunos diputados de la DC, cuando se reunieron con el ministro de Transportes, René Cortazar, le dijeron que prácticamente él tenía el futuro de la Concertación en sus manos. ¿Puede existir una fuerte pasada de cuentas hacia el bloque oficialista?-Si no se resuelven los problemas de la gente, las consecuencias serán muy duras, no sólo para la Concertación sino que para el gobierno y la política en general. Ojalá que todo esto se resuelva porque esta es la mayor embarrada en toda la historia en el país.