«Mon cher Marco» . Eugenio Tironi

Por cosas del destino ahora cayó en mis manos un mail que envió esta mañana a Marco Enríquez-Ominami su amigo, el famoso publicista francés Jacques Séguéla. Mi traducción deja mucho que desear. Pero dice más o menos así:
“Querido Marco. He seguido esta elección como si yo estuviese ahí. No pasaste a la 2ª ronda, pero obtener el apoyo de dos de cada diez electores es simplemente espectacular. Yo he estado en muchas campañas, y nunca había visto a un candidato enfrentar fuerzas tan poderosas y obtener un resultado tan promisorio. ¡Tienes un gran futuro por delante! Pero debes cuidarlo. Lamentablemente, he visto muchas veces cómo la excitación del éxito electoral lleva a la embriaguez.
Yo te había prometido estar en Santiago esta semana para apoyarte si pasabas al siguiente turno; pero no siendo así, deberé cumplir con otras obligaciones aquí en París. No obstante, quiero darte algunos consejos por esta vía. Tú tómalos o déjalos, pues vienen de alguien con mucha experiencia, pero que mira las cosas desde miles de millas de distancia y que no puede desprenderse de la racionalidad tan francesa.Con tu campaña, los chilenos ahora conocen tu historia, tus capacidades, tus propuestas. No eres un vehículo desechable a través del cual han expresado sus frustraciones o anhelos del momento. Debes evitar todo lo que te coloque en esa posición, y proyectar tu liderazgo.

He leído que tu idea es formar un movimiento político (algo como “Copihue”, que no sé qué significa…). Tienes que hacerlo ¡ya! No esperar ni un minuto, porque después ya será tarde. Pero no puedes hacerlo si abdicas de tu responsabilidad como líder ante la 2ª vuelta.

Anoche no era el momento. Pero si tú no tomas partido, el movimiento que quieres construir se pulverizará antes de nacer, pues la atmósfera se llenará de rumores, se crearán bandos y se iniciará una pugna de liderazgos para llenar el vacío de dirección que tú dejas. Si tal cosa ocurre, todo tu esfuerzo, y el gran sacrificio que ha hecho Carlos, habrán sido en vano, pues reconstruir la unidad después de tal fragmentación es imposible. No, mi querido Marco: tú eres un líder, y los líderes marcan siempre una dirección; quizás no la óptima (esos son los mesías, no los líderes), pero sí la mejor de acuerdo a las circunstancias. Quien te diga lo contrario, créeme que te está utilizando como un hobby personal, no pensando en lo que es mejor para ti.

Tú no eres un líder cualquiera. Tú crees en la fuerza de la voluntad, no en la fuerza de la inercia. Tú no tienes temor a las decisiones, ni vas a dejar que otros las tomen por ti. Tú no vas a actuar protegido por el secreto. Por esto, hoy debes dar otro ejemplo, tan histórico como tu candidatura. Llama tú mismo, sin intermediarios y en forma transparente, a dialogar a los dos candidatos que estarán en la 2ª vuelta. Si se produce un entendimiento satisfactorio con uno de ellos, dale tu apoyo y pide a tus votantes que lo respalden. Si logras una cosa así, serás el king-maker de esta elección, cambiarás la forma como se hace la política en Chile, y te proyectarás como la principal figura política del futuro.

Me dirás que algo así es difícil. Lo sé. Pero tú conoces cómo se produjo lo de Nicolás y Carla, en mi mesa en París. Venían de historias totalmente diferentes, pero fueron capaces de dejar de lado los prejuicios y construir un proyecto conjunto, que ha sido beneficioso para ambos. No conozco al señor Piñera, pero conociendo a Ricardo y a tantos líderes de la Concertación, creo que lo tuyo es mucho más fácil que lo de Nicolás y Carla.

Los vi anoche. Alegría y desconsuelo. ¡Qué emociones tan encontradas! Dijiste las palabras perfectas, porque no era el momento de la razón. Pero en adelante debes tener cuidado, mi querido Marco, de no dejarte impulsar ni por la euforia ni por el rencor. Ahora se inicia otra historia. La historia que tú mismo inauguraste. No la dejes ir.

Con el cariño de siempre, tu amigo Jacques”. [+/-] Seguir Leyendo...