El Voto Municipal?. Hernan Flores.

El 26 de octubre, fecha en que se realizan las elecciones municipales, donde se elige un Alcalde por comuna y Concejales dependiendo del nº de electores de cada comuna, en ella se deciden varias cosas importantes.
La primera es si nuestra democracia puede ejercitarse renovando o ratificando sus mejores liderazgos;
Segundo, Si las comunas pueden acoger la participación de ciudadanos cada vez más exigentes y críticos;
Tercero, si las administraciones locales quedarán en mejores condiciones para evolucionar hacia auténticos gobiernos locales
Cuarto, Si las instancias municipales irán ganando reconocimiento como para acentuar la descentralización del poder.
Estamos en un momento importante. En el ámbito local no se trata únicamente de administrar lo que se tiene, sino de dar muestras de que se puede seguir transfiriendo mayores atribuciones y competencias a los municipios, porque la proximidad con el ciudadano es una ventaja inigualable que esta entregando buenos frutos comprobables.
Se trata de ampliar la cooperación entre niveles del Estado y entre los sectores público y privado. De acrecentar los vínculos y el trabajo con las organizaciones de la sociedad civil. De descentralizar el poder y de mejorar la equidad territorial. Todo esto se ve favorecido si escogemos bien, poniendo a las mejores personas disponibles donde más se les necesita.
Se trata de una oportunidad cívica del ejercicio efectivo de la ciudadanía por parte de las personas, que debe ser aprovechada. Caso a caso, ellas pueden hacer la diferencia hacia una mejor vida en comunidad. Algunos, decepcionados por lo que ven, se refugian en la abstención; pero, sin duda, su mejor respuesta frente a lo que les desagrada es escoger bien y darle la oportunidad a los mejores servidores públicos.
En democracia nadie puede considerarse un espectador. Todos somos responsables no solo de nuestros actos, sino de lo que permitimos con nuestros actos lo que ocurra a nuestro alrededor.
Por eso hay que meditar el voto, porque así como hay ejemplos malos, los hay también buenos. A los auténticos servidores públicos se les reconoce de inmediato. Son aquellos capaces de escuchar, no tienen horario para servir. Se conmueven con los dolores ajenos, sienten orgullo por la comunidad.
Tal vez lo que se decide en esta elección es saber escoger a los que sirven, es decir descubrir quienes son, de escogerlos y de ponerse a trabajar juntos para tener una vida mejor.
Eso es lo que se juega el 26 de octubre.

Nada más.
Nano Flores
Opinión Personal e instraferible