Misa Quincuagésimo Primer Aniversario Fundación Partido Demócrata Cristiano.

Como todos los Cristianos, lo hacemos celebrando una Santa Misa, para agradecer por todos los hechos positivos que han ocurrido durante el último año; recordar a nuestros Camaradas que nos han antecedido en la partida y pedir muy especialmente para aprender de los errores que se han cometido en los últimos meses y que estos hechos no se vuelvan a repetir, además pedir por todas las sanas intenciones que se guardan en cada uno de los corazones.-
El Partido ha cumplido más de medio siglo de existencia y sin embargo, los porfiados hechos lo tienen sumido en una dramática crisis, sólo comparable a lo ocurrido en los años setenta que trajo consigo la división interna y que motivo la salida de una cantidad importante de militantes.-
Pero esta crisis, no es sólo del último tiempo, se viene arrastrando desde hace varios años y si los dirigentes Nacionales no son capaces de enmendar el rumbo, estamos condenados a desaparecer como Partido Político.-
Que bien calza el Evangelio y las lecturas del domingo recién pasado, la Convivencia Humana, Mateo 13, 24-43: “ El Reino de los Cielos se parece a un hombre que sembró buena semilla en su campo; pero mientras todos dormían vino su enemigo, sembró cizaña en medio del trigo y se fue.”
Mas adelante dice: “el que siembra la buena semilla es el Hijo del hombre; el campo es el mundo; la buena semilla son los que pertenecen al Reino; la cizaña son los que pertenecen al Maligno, y el enemigo que la siembra es el demonio; la cosecha es el fin del mundo y los cosechadores son los ángeles.-
Este es el Partido, sus fundadores sembraron buena semilla, con Principios y Valores inquebrantables, sin embargo, el Maligno son las personas que existen en su interior y que su egoísmo, envidia, ansias de Poder por el Poder, es la cizaña, que crece junto con la buena semilla.- Si Dios permite la coexistencia, a veces escandalosa, del trigo y la cizaña ¿quiénes somos nosotros para precipitarnos en el juicio y en la acción justiciera, descalificando a diestra y siniestra, llenos de intransigencia?.-
Y la paciencia no es despreocupación, desinterés y egoísmo.- Ni la tolerancia es debilidad.- Es un ejercicio de amor sin el que nada vale la lucha por la verdad y la justicia.- Cargados de paciencia para no emitir juicios prematuros frente a una realidad que se resiste a cambiar, que nos empape la paciencia activa el corazón.- Que el espíritu Santo venga en nuestro auxilio para calmar nuestras impaciencias, poniéndola siempre en relación con la paciencia de Dios.-
Debemos aprender a ser más “humanos”, llenos de tolerancia amorosa, a tener buen corazón, a no desenvainar la espada y arremeter contra quien no piense como nosotros, a ser capaces de dialogar con todos y sin excepción.- Convivir con el mal no significa aceptarlo y aprobarlo.-
Los ideales, valores y principios de ayer, están vigentes hoy; pero, los actuales líderes que conducen el Partido, lenta pero sostenidamente se han alejado del juramento que formularon el día que ingresaron al Partido; hoy es mucho más importante el tener que el ser.- Un día ingresamos a la Democracia Cristiana, para servir a los demás; sin embargo, hoy vemos con estupor como muchos de ellos lo han hecho para servirse del Partido y obtener beneficios personales.-
Cuando percibe que los Dirigentes no actúan con la consecuencia de los Principios que un día juraron abrazar; no confían; los ciudadanos comunes y corrientes y que no militan en ningún partido; eran un electorado cautivo que siempre votaba por nuestros candidatos; por que tenían fe y confianza en cada uno de ellos.-
En la próxima campaña municipal, el Partido, por lo menos en esta Comuna debería trabajar más unido que nunca; de lo contrario, el 26 de Octubre, podríamos tener una desagradable sorpresa; con una paupérrima votación y que ni siquiera alcance para reelegir a nuestros 2 Concejales en ejercicio.-
A partir de ahora, manos a la obra, la peleas internas deben llegar a su fin y los camaradas que tenemos responsabilidades Directivas, debemos saber comportarnos a la altura del Partido que aún es primera mayoría en el País.-
Con la humildad, que nos entrega el ser Cristianos de corazón, pidamos al Espíritu Santo y al Espíritu de nuestros Fundadores para que vengan en nuestro auxilio, nos iluminen y abran los corazones duros para superar nuestras propias diferencias y lograr en el más corto plazo posible la ansiada Unidad del Partido.-
Que esta reflexión, nos disponga para participar de esta Santa Misa, recordemos muy especialmente a los fundadores de nuestro Partido y a nuestros Camaradas que ya no están con nosotros y que en vida muchos de ellos hicieron muchas cosas por nuestra Patria.- También pidamos por la salud de nuestros enfermos y por todas y cada de una nuestros particulares intenciones.-
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home