domingo, noviembre 05, 2006

..SOBRE CORRECCIÓN DEL MODELO, IDEOLOGÍAS Y CALDILLO DE CONGRIO

Por Rodrigo Castillo.
lleguen recién casados los sabores del mar y de la tierra…
Camaradas, a la luz de la interesante discusión planteada respecto de la corrección del modelo v/s la profundización del modelo, quisiera ahondar, ahora desde esta óptica, respecto de una intervención anterior en que daba cuenta de que, en mi opinión, uno de los graves problemas de nuestro partido es que, o no sabemos cual es nuestra doctrina e ideología, o en el caso de quienes creen saberlo, no estamos de acuerdo entre nosotros respecto del lenguaje a utilizar ni tampoco respecto de las consecuencias que puede traer, en la práctica, una u otra definición.
Y el problema no es sólo nuestro. Es probablemente uno de los aspectos más debatidos y explicados por los filósofos y teóricos contemporaneos, al referirse a lo que se ha llamado (y aquí no estoy adscribiendo ni afirmando) la posmodernidad.
Hace 15 o 20 años, por poner años cualquiera, caída del muro de Berlín, Perestroika, en fin… aún existía, al menos, una ideología - la marxista – que, entre otros motivos, por estar basada en principios económicos y explicar la realidad a través de relaciones de conflicto – económicas – relativas a la propiedad y uso de los medios de producción, daba respuesta amplias respecto del devenir de la historia y sus ciclos, y a la vez entregaba una receta única y omnicomprensiva respecto de la manera en que debía organizarse el Estado para corregir el curso de la historia y crear una nueva sociedad.
Frente a esta realidad, existía otra ideología, la llamada ideología liberal tantas veces citada, que también se basaba en principios económicos para comprender la realidad, pero que por su propia naturaleza, lo que planteaba era la necesaria libertad del hombre para comportarse, en materias económicas, de acuerdo a sus propios fines e intereses, pues en su opinión, de esta manera, la suma de los objetivos libres de cada ser humano y la maximización de las iniciativas privadas generarían el mayor bienestar general.
Pues bien, el tema de fondo es que el marxismo, salvo excepciones hasta aquí anecdóticas, resultó en un fracaso y ya no existe, en la práctica, en prácticamente ningún lugar.
Y entonces, mucho señalaron que se trataba del triunfo definitivo de la ideología Liberal… Otros pregonaron, definitivamente, el fin de la historia … y sin embargo, también el liberalismo es objeto de múltiples críticas.
Y entonces… ¿dónde estamos nosotros, los democratacristianos?
Vuelvo a mi pregunta original de otro artículo.
Que significa, en la práctica ser humanista cristiano? … Qué nos diferencia de Piñera o la UDI que se declaran como seguidores de esta misma dóctrina.
La respuesta necesariamente es ideológica. Nosotros no aceptamos que el motor de la historia sea simplemente económico, y por lo tanto, podemos administrar diversos modelos económico, porque ellos no MARCAN nuestro modelo de sociedad.
Creemos en la libertad. Pero sabemos que para ser libres, se requiere oportunidades, educación, salud y no tener hambre. No creemos que los hombres puedan ser considerados iguales en dignidad cuando en la práctica no reciben las mismas herramientas para tomar sus decisiones.
Y sí. Creo que en la correción del modelo, y quisiera explicarla.
El modelo económico actual, desgraciadamente, a ratos se confunde con el modelo de sociedad. Y esa es la trampa en la que no podemos caer.
Crecimiento con igualdad?
Sí, tal vez, en algunos.