El vidente . Eugenio Tironi

Los mails juegan malas pasadas. La peor: enviarlos a direcciones equivocadas. ¿A quién no le ha ocurrido? Hace algunas horas recibí un mail dirigido a "Comité Estratégico El Golf", cuyo asunto era "Memorándum Confidencial: Evaluación CxC y MEO", con un remitente que firmaba misteriosamente como "Vidente". Éste es textualmente su contenido:

"Contrariamente a lo que han dicho los miembros de nuestro sector, el lanzamiento de la 'Coalición por el Cambio' (en adelante CxC) ha sido un fracaso, y la irrupción de la candidatura de Marco Enríquez-Ominami (en adelante MEO) es un misil lanzado por la Concertación que puede hundir a Sebastián.

Respecto de CxC, dos cosas. La primera, que su apelación al 'cambio' está totalmente fuera de lugar en estos tiempos y viniendo de nuestro sector. ¿Cómo llamar al 'cambio', cuando Bachelet y su gobierno logran niveles récord de aprobación, son capaces de alcanzar un acuerdo histórico entre trabajadores y empresarios para responder a la mayor preocupación de la población ante la crisis económica, como es el desempleo, y hasta se atreven a dar lecciones de transparencia? Por lo demás, si los chilenos quisieran un cambio de verdad, éste tendría como damnificado a nuestro propio sector, a cuyo candidato se lo identifica -por cierto, injustamente- con un capitalismo audaz y codicioso al que se le achaca la crisis económica y al cual todo el mundo pide reformar.

En segundo lugar, si se quería ampliar la Alianza, la CxC definitivamente 'guateó' (nada personal en esto). No nos pasemos películas. Esto de decir que con la CxC se termina la división entre el 'Sí' y el 'No' es la mejor demostración de estar pegados en otra época: perdónenme, pero esto ya no le importa a nadie. Mostrar a Flores y Schaulsohn como los nuevos símbolos de nuestro sector atenta contra los códigos éticos de muchos de nosotros y nos puede convertir en víctimas de sus inescrutables caprichos y ambiciones. Como si ello fuera poco, esa foto donde aparece una serie de señores de terno sentados en butacas blancas, con Flores y Piñera en el medio levemente separados del resto, pareció sacada de un álbum del Beijing de Mao o del Moscú de Brezhnev.

Respecto de la irrupción de MEO, está bien que lo aplaudamos y que lo recibamos con los brazos abiertos en las universidades que el cura Berríos llamara tan impropiamente "cota mil", pero quiero pedir que no nos engañemos. MEO es un artefacto inventado por la Concertación (basta escuchar a Ominami o Girardi), que quiere mantenerse en el poder a cualquier precio. Fue levantado para devaluar definitivamente nuestra oferta de cambio, para expropiarnos el discurso contra el amiguismo y la corrupción, para erosionar nuestro apoyo entre los jóvenes y para evitar que se vengan con nosotros sectores que habían roto o que estaban por romper con la Concertación. Las dos coaliciones necesitan expandirse para ganar; pues bien, la Concertación ha sido mucho más astuta y eficaz al hacerlo a través de MEO (quien con certeza les apoyará en segunda vuelta) que nosotros al hacerlo a través de la dupla Flores-Schaulsohn (que no sabemos siquiera si nos acompañarán hasta el final).

Todo esto me lleva a concluir que nuestro posicionamiento estratégico, sostenido en el 'cambio' y el 'no más corrupción', ha sido pulverizado. Estamos ante una crisis que hay que reconocer. Propongo una reunión urgente, ojalá sin Sebastián, para hablar sin tapujos al respecto".

Ruego a los lectores me perdonen, pero no pude resistir la tentación de usar esta tribuna para publicar este mail, que llegó involuntariamente a mi casilla.

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