martes, septiembre 02, 2008

''Soledad no se la jugó por mí''

La alcaldesa de Quilicura, Carmen Romo, a sus 69 años, emblemática para la DC y la Concertación, con 16 años en la comuna, militante histórica de la facción de los “guatones” y hasta hace poco una jugada alvearista, habla aquí sobre el quiebre de su relación con la presidenta la falange. La edil cuenta que luego del mediático acto de desagravio en un colegio municipal de Quilicura a favor de la destituida ex ministra Yasna Provoste, donde participaron niños y apoderados, tomó la decisión de alejarse y marcar el terreno sobre su futuro como militante. La señal más potente que entregó a la actual directiva de la DC fue hace pocos días en el acto de proclamación de su hija, María Margarita Indo, candidata alcaldesa por la comuna, donde participó junto al senador y ex Presidente Eduardo Frei junto a su otro hijo, el diputado también DC, Gabriel Silber.
Su alejamiento, explica Romo, se produjo por el silencio de la senadora cuando ocurrieron los hechos en Quilicura en momentos en que el diputado de la UDI, Patricio Melero, llevó el caso a la Contraloría. Pero también por el nulo apoyo que recibió de la timonel. “Todos los que participamos sabíamos que iban niños al acto”, comenta en su oficina de la municipalidad para aclarar lo que se dijo en ese entonces, cuando se dio a entender que Alvear no sabía de la presencia de menores en el evento realizado en horario escolar.
La alcaldesa, en conversación con El Mostrador.cl, explica que, a diferencia de otras oportunidades, esta vez su familia no determinará lo que ella haga hacia adelante.
¿Por qué se produjo el quiebre entre usted y Alvear? -Porque en ese momento (el acto en el colegio junto a Provoste) necesité su apoyo. Me jugué por ella ciento por ciento. Nadie puede olvidar que cuando triunfé en la comuna, se lo dediqué a ella. Pero Soledad no se la jugó por mí, pero la comprendo, es candidata a Presidenta de la República. Una de las críticas que se le hace a Alvear es que nunca se arriesga en nada, que se la juega poco en los temas importantes -No quisiera seguir opinando del tema. No me gustaría que mi hija tuviera problemas por mis opiniones. Pero lo que me obligó a replantearme mi posición en la DC fue el poco apoyo que tuve después de haber participado en el acto. He tenido grandes problemas como alcaldesa y los he enfrentado con fuerza y valentía. Lo hice y punto, no puedo volver atrás. Pero decir que no sabía que iban a haber niños, eso no lo puedo hacer. Quizás fue un error, pero lo asumo públicamente. ¿Qué opina de las peticiones que se han hecho para que Alvear deje la presidencia de la DC? -Creo que ella debe seguir como presidenta. Yo voté por ella y trabajé mucho para que saliera. Tiene que hacerse cargo de los resultados de las elecciones municipales. Su decisión debe tomarla luego del 26 de octubre. Ella no tiene por qué asumir una futura derrota, ella representa a la directiva, pero los responsables somos todos quienes militamos en la DC. Frei es el hombre Usted estuvo hace poco proclamando a su hija en un acto donde el principal orador fue el senador Frei. ¿Esa fue una señal para su directiva? -Al senador lo respeto porque fue un buen Presidente de Chile. Fue el primero en llevar el proceso de modernización del Estado y trabajó muy unido a las comunas.
¿La llamó alguien por teléfono de la DC? -No, porque saben que no acepto las llamadas. El único que me puede hacer cambiar posiciones es mi hijo.
¿Y su hijo podrá hacerla cambiar ahora, que públicamente adhirió a Frei? -Cuando ocurrió lo del colegio, no sentí el apoyo. Se podría haber transparentado su posición (de Alvear). Porque estuvimos juntas en ese lugar. Pero en política no se llora. Se lo voy a explicar de esta forma: nosotros somos una familia muy unida, aunque pensamos diferente. Pero cuando llega el momento, nos unimos. A lo mejor en algún momento no estuve en el grupo de Alvear, pero después me uní y lo hice por mi familia. Pero eso no quiere decir y menos hoy, que ya no soy candidata, que mis hijos me vayan a imponer un pensamiento. El 26 de octubre dejo de ser alcaldesa y en ese momento voy a elegir mi lugar y mi espacio dentro de la DC. Ese día soy Carmen Romo, no la mamá, y mis últimos años me la voy a jugar por lo que yo creo, por una DC más abierta.
¿Cómo le gustaría que fuese la DC hoy? -Me gustaría ver una DC más unida, que no sobre nadie. Creo que el partido tiene que cobijar a todos. Hoy en la DC hay varios líderes y me gustaría que todos trabajaran por el partido. Una de las críticas a la directiva es que ha sido sectaria con gente que piensa distinto a ellos, sobre todo con los colorines que se quedaron. Cuando habla de que se cobijen a todos, ¿se refiere a ellos también? -Sí, creo que todos.
¿En qué temas cree que Alvear se ha quedado atrás? -Creo que hoy existe un desfase con la ciudadanía actual. En el Congreso DC se dijeron muchas cosas, que había que estar cerca de la gente, etc etc, pero en los temas valóricos estamos lejos. No hablamos del aborto, ni de la Píldora del Día Después, ni de la homosexualidad. La ciudadanía quiere saber cómo pensamos. Los jóvenes no se acercan a nosotros porque no hemos sido claros sobre lo que pensamos. Esa fue una de las mayores críticas que se hicieron a Alvear -En la marcha que hubo en Santiago por la Píldora del Día Después había muchos DC. Yo misma participé junto a mis hijos. La DC debe transparentar lo que pensamos. Cuando uno hace campaña o cuando está como alcalde, los ciudadanos no hablan sólo de la calle, del hoyo que hay que tapar, los temas valóricos son sumamente importantes y están presentes. Una vez cuando estaba explicando el presupuesto, un muchacho me preguntó sobre los homosexuales, eso me impactó y me dejó callada. Ahí me di cuenta que esos temas eran esenciales.
¿Qué diría sobre las relaciones homosexuales? -Soy partidaria que reconozcamos el lesbianismo y la homosexualidad. Tengo muchas amigas lesbianas y homosexuales, que siempre me dicen que les abramos espacios, que conversemos más. En el municipio lo he tratado de hacer mucho para demostrar que estamos abiertos a todos.
¿Le pesa a usted la Iglesia Católica como a muchos de su partido? -Soy muy allegada a la Iglesia Católica y a otras más, a los evangélicos, mormones y judíos. Creo en Dios, pero en el que está con la gente, no en un Dios castigador. En eso no creo.