La liberación de Ingrid Betancourt.
La liberación de Ingrid Betancourt en un operativo del Ejército colombiano constituye un hecho histórico en la larga lucha que sostienen las FF.AA. de Colombia en contra de las denominadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia por más de cuatro décadas y un nuevo golpe a la capacidad organizacional del grupo guerrillero que permite avizorar su gradual desarticulación en el mediano plazo. Su rescate ha sido un triunfo del Estado de Derecho y la legalidad interna en la protección de los derechos humanos de los colombianos.El origen de las FARC, en 1964, se enmarca en el contexto de la guerra fria y en el conflicto civil colombiano entre sectores terratenientes y el campesinado que reivindicaban derechos a la tenencia de la tierra.Dicha realidad está divorciada con las actuales condiciones que vive Colombia, con una gobierno legitimado democráticamente e inserto en la globalización.Las FARC, se nutren inicialmente de la ideología marxista, sin asumir los cambios mundiales con el colapso de los socialismos reales y se mezcla con el narcotráfico, el crimen organizado, el secuestro de personas y actividades terroristas que han recibido la condena internacional y de paises como EE.UU y la Unión Europea que consideran al movimiento guerrillero como una asociación ilícita que promueve el terrorismo internacional.Creo que la reciente muerte de Manuel Marulanda, su fundador, pudo abrir una ventana de oportunidades para encauzar el camino del reencuentro y la reconciliación entre los colombianos. Sin duda, Marulanda constituía un factor aglutinante y de cohesión interna en los diversos frentes operativos de la guerrilla que luchan contra el Estado colombiano.Debe reconocerse que en los últimos años el ejercito regular de Colombia había logrado importante logros militares que han debilitado la estructura de las Farc, provocando importantes deserciones y reduciendo sus esferas de influencia territorial.Alfonso Cano, el nuevo líder del movimiento y su mentor ideológico, tiene ahora la opción de aproximarse hacia un relacionamiento más político, que puede conducir al cese de las hostilidades e iniciar una nueva etapa con el gobierno del presidente Uribe que permita la total liberación del resto de los rehenes y una ammistía en el marco de un acuerdo global de pacificación interna y lograr la reinserción de los grupos armados en la sociedad.A nivel regional las Farc constituyen un permanente factor de perturbación regional, que afecta la paz y estabilidad hemisférica, gatillando graves incidentes entre paises vecinos, como lo fue el reciente conflicto aún no resuelto entre Ecuador, Colombia y Venezuela.Creo que los paises de la región en conformidad a la resolución 1373 de las Naciones Unidas que insta a combatir el terrorismo, deben dar una inequívoca señal de rechazo a la violencia y apoyar al Estado colombiano en su ardua lucha por preservar la paz interna y el estado de derecho en el pais e instar por la inmediata liberación de los casi 900 rehenes que aún mantiene cautivos en poder de la guerrilla.
Nelson Hadad
Ex embajador de Chile.
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